"Insoportable". Así definieron la situación muchos de los conductores que en torno al mediodía de ayer se vieron atrapados en la subida al Angliru, en Riosa. Lo que iba a ser una mañana de disfrute en la nieve acabó en una pesadilla.

Y es que la idea de "ir a ver la nieve" al famoso pico asturiano la tuvieron muchos asturianos, sobre todo, familias con niños, a las que el sol matutino animó a salir de casa. Pero la ya de por sí estrecha carretera del Angliru es un peligro estos días debido a que la nieve se acumula en sus arcenes. El resultado: una caravana de más de 9 kilómetros, con decenas de coches atascados que lo tuvieron muy difícil para dar la vuelta al no poder llegar al aparcamiento de la cima, lleno. Hubo conductores que salieron a dirigir el tráfico para salir del atasco. La ausencia de agentes de Tráfico o avisos molestó a algunos usuarios.