La ruptura sentimental de la presentadora asturiana Luján Argüelles y su marido, Benjamín de la Fuente, ha pasado de ser un asunto íntimo y personal a pasto de las redes sociales gracias al indiscreto uso que hace de ellas el ex jugador de baloncesto. El 20 de noviembre se ponía fin a tres años de matrimonio y el ex deportista fue el primero que informó de la inesperada noticia en su cuenta de Twitter, al tiempo que algunos medios informaban de que ella le había puesto de patitas en la calle virtualmente por medio de la aplicación de mensajería móvil Whatsapp. Según algunos medios, el contenido del supuesto mensaje era: «Benja, cuando llegue a casa esta noche espero que hayas hecho la maleta y te hayas ido. Ya hablaremos del resto de condiciones. Pero, por el momento, lo vamos a hacer así (...). No te preocupes que organizaremos bien en qué condiciones te quedas, pero no quiero continuar como pareja más tiempo (...). No me llames, por favor, ni marees porque hoy tengo que trabajar y mañana estrenar el programa. Es lo mejor y nos irá mucho mejor a los dos. Besos».

Todo muy moderno. Al principio, el ex jugador de baloncesto fue muy moderado: «Muchas gracias a mis padres y amigos por todo el apoyo y el cariño recibido en estos momentos tan difíciles. Nunca lo olvidaré», e incluso dedicó una canción, «Lo que nace se apaga» de Dani Martín, a Luján: «Para ti». Pero el esposo no se conformó con dar la primicia y, de pronto, usó la misma red social para lanzar un ataque en toda regla: «Llevo suplicando hace setenta y seis días que soluciones esta situación tan desagradable que afecta directamente a mi padre». Y no fue un impulso repentino del que arrepentirse luego porque sus palabras siguen en el mismo sitio. Según la versión del ex marido, Luján Argüelles pidió un supuesto préstamo que el padre de Benjamín de la Fuente avaló y ahora reclama que la presentadora salde la deuda.

«Debía darte vergüenza que estés humillando de esta manera a mi padre, un señor jubilado al igual que el tuyo», volvió después a la carga, dejando en evidencia que los problemas entre la pareja tienen orígenes económicos. Y más madera: «Es inconcebible que con tu inmejorable situación económica no liberes el dinero que él avaló por ti en tus momentos de necesidad». A Luján Argüelles los píos («tuits») de su ex pareja le entran por un oído y le salen por otro, a la vista de su silencio virtual. «Entiendo tu egoísmo, pero no afectes a un anciano por nuestras diferencias», vuelve a disparar Benjamín de la Fuente. «Espero y deseo que nunca traten a tu padre como tú estás tratando al mío. Ya está bien». Con esas sombrías palabras concluyó su ofensiva el 14 de diciembre. Cuatro días después, lanzó un enigmático mensaje: «Hoy, 18 de diciembre, es mi cumpleaños. Una persona, a las 14.59, me ha enviado un e-mail y no precisamente para felicitarme, más bien amenazante». La presentadora de «¿Quién quiere casarse con mi hijo?» se ha limitado a decir que «iremos a juicio y allí se verá todo». ¿Lo leeremos también en Twitter?