En los años cuarenta, tiempo de la autarquía, y en los cincuenta, ya con el horizonte del Plan de Estabilización a la vista, en la Fábrica de Armas de Oviedo se trabajó duro. De allí salió por aquella época la ametralladora Alfa, otro modelo emblemático, en dos versiones, las de los años 1944 y 1955.

Bastantes años antes se había diseñado el fusil ametrallador conocido como el OC (iniciales de Oviedo y Coruña). La Guerra Civil sirvió para dar un empujón a la industria armamentística nacional, y el OC empieza a suministrarse a los soldados del frente hacia 1938; por supuesto, con destino a las tropas franquistas.

La actividad en la Fábrica de Oviedo se suspende el 19 de julio de 1936, tras la decisión del entonces coronel Aranda de sumarse al golpe militar. No se reanuda hasta principios de 1938, ya con las tropas nacionales dueñas del territorio asturiano (Gijón, último bastión republicano, cae en octubre de 1937). La primera gran actividad industrial en la Vega es precisamente con ese fusil OC que no fue precisamente un arma de exquisitas prestaciones pero que en aquel decisivo año de 1938 resultó vital en las operaciones bélicas.

El OC se construía en Asturias pero utilizando piezas que llegaban de la Fábrica de Armas de La Coruña, de talleres particulares e incluso hubo abastecimiento de piezas provenientes de Mallorca. El OC de 1938 sustituyó a otra arma de origen francés, el fusil Hotchkiss de 1925. Pero cuando estalló la contienda civil, aquel Hotchkiss se había quedado definitivamente obsoleto.

En la Fábrica de Armas de La Vega se presentó otra variante del OC. El prototipo es una de las armas de la colección ahora estudiada y clasificada en el Gobierno Militar de Asturias. Para el profano en la materia, el fusil ametrallador y su variante parecen iguales. No lo son; uno acabó siendo producido en serie y otro se quedó en un mero plan industrial.

En la Delegación Militar en Asturias los tenientes coroneles Francisco Javier Serres y Enrique Corominas y el subteniente Jesús de Diego viven la consolidación de la colección como una oportunidad de oro para recuperar la historia y homenajear a quienes la hicieron posible.