Gijón, María IGLESIAS

Luis Prieto es urólogo en el Hospital Universitario de San Juan -Alicante- y coordinador nacional de urología funcional femenina y urodinámica. El facultativo apoya el tratamiento «alentador» que supone la aplicación de botox vesicular para reducir la incontinencia urinaria, aunque advierte de que sólo podrá ser aplicado a un reducido porcentaje de pacientes. Prieto, además, es uno de los responsables de organización del grupo nacional de trabajo de urología, junto con el jefe del servicio de urología de Cabueñes, Valentín Muruamendiaraz, y el jefe de la unidad urodinámica de Cabueñes, Luis Rodríguez Villamil.

-¿Cómo es posible que con los avances médicos existentes todavía se den problemas de incontinencia urinaria?

-La incontinencia urinaria, a día de hoy, supone, sólo en gasto farmacológico, un gasto tan alto o mayor que el de la diabetes. La incontinencia urinaria produce una sintomatología en ocasiones devastadora, sobre todo depende de a qué personas afecte. Al ser un síntoma que afecta mucho a la calidad de vida, determinadas condiciones pueden provocar sintomatologías asociadas. Entre el 30 y el 50 por ciento de las mujeres de un promedio de 65 años que padecen incontinencia urinaria sufre depresiones asociadas a esa incontinencia. Siendo un síntoma no de salud, sino de calidad de vida, produce una gran afectación entre las mujeres, y también en los varones.

-¿Existen tratamientos preventivos para evitar la incontinencia?

-De forma preventiva, los mecanismos del programa de salud de rehabilitación y reeducación de suelo pélvico no adquieren el nivel deseable por una cuestión de recursos económicos, pero existen otros tratamientos no preventivos que hoy en día permiten el tratamiento adecuado en muchos casos.

-¿Cuáles son?

-Los tratamientos dependen del tipo de incontinencia y también de la población a la que te dirijas. La incontinencia puede afectar a niños, jóvenes, adultos y ancianos, y cada uno conlleva un tipo de tratamiento y de evaluación diferente.

-¿Cuál es el tipo de incontinencia más frecuente?

-Es la incontinencia urinaria femenina o la incontinencia urinaria de urgencia. Son las que demandan mayor asistencia; sin embargo, existen otros tipos de incontinencia urinaria que requieren una serie de tratamientos de mayor complejidad.

-¿Cuáles son los tratamientos más complejos?

-La incontinencia neurogénica, puesto que tiene una dependencia de evaluación más frecuente y urgente.

-¿A cuántas mujeres afecta esta patología?

-Los estudios epidemiológicos son muy variables, aunque, en principio, casi un 30 por ciento de mujeres en edad adulta puede padecer incontinencia urinaria, y hay que mirar de qué forma psicológica afecta.