Oviedo,

L. Á. VEGA

El embajador de Perú en España, José Luis Pérez Sánchez-Cerro, inició ayer una visita de dos días a Asturias para estrechar relaciones con el Principado -que dará 350.000 euros para reconstruir el pueblo de San Andrés, destruido en el último terremoto- y «vender» su país entre los empresarios. El embajador, que está seleccionando candidatos para el futuro Consulado de Perú en Asturias, también ofreció una conferencia en el Colegio de Abogados de Oviedo, como miembro del Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas.

-¿Qué puede ofrecer Perú a los empresarios asturianos?

-Perú es un país con una economía muy estable, con unas instituciones democráticas también muy estables, que ha superado el problema del terrorismo. Un país que ha estado creciendo al 9 por ciento, una de las cifras más altas del mundo, casi asiática. Hay toda una política de apertura de mercados. Las españolas suponen el 35 por ciento de las inversiones en Perú. Las empresas españolas más importantes están allí, en telecomunicaciones, energía y banca...

-¿En qué otros campos pueden entrar?

-Nos interesan ahora las infraestructuras, la construcción de carreteras y viviendas. Hay proyectos para que haya una presencia española, como la construcción del tren eléctrico para Lima y de diferentes ejes de carreteras. También para la modernización de los 16 aeropuertos y para la mejora y la ampliación de puertos, como el de El Callao.

-¿Hay buenas relaciones?

-Atravesamos el mejor momento histórico, no hay ningún contencioso y las relaciones están muy fortalecidas por el intercambio de visitas de alto nivel, la última, la del presidente Alan García.

-Perú está fuera de la corriente populista de los últimos años.

-Sin duda. Perú representa el balance, el equilibrio. Se ha convertido en un país fiable, no sólo desde el punto de vista económico, sino también social y político. Por supuesto, constituye un destino turístico importante para los españoles, sobre todo ahora que el Machu Picchu ha sido proclamado una de las maravillas del mundo.

-La colonia peruana en España es muy inferior a la ecuatoriana. ¿Habla eso a favor de la situación económica del país?

-Sin duda. Aquí somos unos 150.000. Es la colonia más antigua de emigrantes en España, muy integrada -la mitad tiene doble nacionalidad- y constituida por gente honesta y trabajadora, que se mantiene alejada de las páginas policiales y representa un importante flujo de remesas hacia Perú. Esta colonia está recibiendo por parte del Gobierno peruano algunos alicientes para el retorno, incluso créditos para la compra de vivienda. En España tenemos ya diez consulados y está previsto abrir otro en Oviedo en breve.

-Como miembro de la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas, ¿qué países están dando más problemas?

-Sin duda hay situaciones más dramáticas que otras. África nos preocupa mucho, por ejemplo, Darfur. Algunos países incumplen las recomendaciones. Pero en general el comité pone su granito de arena, pese a las limitaciones de presupuesto y la tremenda labor de fiscalizar los países miembros, que son muchos.

-¿Está entre ellos China?

-No.

-¿Cree que el boicot a las Olimpiadas puede hacer que los derechos humanos mejoren?

-Lo importante, más que el boicot, es el clamor popular que se refleja en muchos países a manera de demanda de un mayor respeto de los derechos humanos. Y habría que aprovechar una coyuntura como es la celebración de los Juegos Olímpicos, que, además de unir a los pueblos en torno al deporte, supone una publicidad sobre temas en los que los países tienen mucho que trabajar.

-¿Reciben quejas de Irak?

-Hay una situación que, más que a los derechos humanos, afecta al derecho internacional, el que regula las guerras. Ese derecho muchas veces se ve violentado. Y una de esas crisis se dio a raíz de la intervención en Irak, que no tuvo el consentimiento del Consejo de Seguridad. Ese tipo de manifestaciones son las que debilitan el derecho internacional.

-¿Han firmado la tregua los Estados Unidos y la ONU?

-Lo importante es ratificar la voluntad de los estados en la validez del multilateralismo. Es lo único que puede preservar la validez del derecho internacional. Estados Unidos es fundador del Consejo de Seguridad y, por tanto, es un país creyente en la necesidad del multilateralismo.

-Benedicto XVI pidió ayer a Bush que contribuya al desarrollo de Hispanoamérica.

-Hizo un llamamiento a la utilización de la diplomacia más que a la fuerza. Y hay un llamamiento a prestar atención a los países latinoamericanos. En Europa hay un relativo poco interés por Iberoamérica. Europa se vuelca en sus asuntos y, en términos de cooperación, hacia África, y considera a América como un continente de renta media, con pocas necesidades, pero yo creo que el tema de la pobreza y la exclusión social siguen siendo prioritarios. Ése será el tema central que se va a ver en mayo en la cumbre de Lima, a la que acudirá Zapatero.

-¿Se ha enfriado el conflicto entre Colombia y Venezuela?

-Se ha superado. No es de extrañar que ocurran situaciones como ésa entre países vecinos. Yo, que he sido embajador en Colombia, puedo decir que son problemas que ocurren siempre, pero que tienen una rápida solución. No sólo se trata de los entrañables vínculos históricos, sino también de la interdependencia en términos de comercio y de inversiones. No se pueden cerrar fronteras, porque la vida de millones de personas depende de ese tránsito.

-¿Es posible superar la violencia en Colombia?

-Es un problema con casi 50 años ya, pero hay la mayor voluntad del Gobierno colombiano de encontrar una solución, sin ceder a las pretensiones del terrorismo y de los guerrilleros. Colombia es un gran país, con gran desarrollo, pero que desafortunadamente ha tenido esta lacra del narcoterrorismo, como en su día lo tuvo Perú.

«No se pueden cerrar las fronteras entre Colombia y Venezuela porque millones de personas dependen de ese tránsito» «Conflictos como la intervención en Irak, que no tuvo el consentimiento del Consejo de Seguridad, debilitan el derecho internacional» «Nos interesa la inversión española en infraestructuras como construcción de carreteras y viviendas» «El multilateralismo es lo único que puede preservar el derecho internacional»

El embajador de Perú se reunió ayer en Oviedo con el presidente regional, Vicente Álvarez Areces, con quien pretende establecer un plan permanente de cooperación, con el alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, y con representantes de la cooperativa farmacéutica Cofas, que ha remitido dinero a Perú para paliar los efectos del último terremoto. Ya por la tarde, en el Colegio de Abogados de Oviedo, ofreció una conferencia sobre sistemas universales de protección de derechos humanos, auspiciada por la Academia de Jurisprudencia. En la fotografía, el catedrático Javier Junceda, José Luis Pérez y Jesús Bernal, presidente de la Academia de Jurisprudencia.