Oviedo, M. M.

El presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, discrepó ayer abiertamente de los planteamientos defendidos por el presidente de Cataluña, José Montilla, respecto a la financiación autonómica. Areces rechazó que la revisión del modelo pueda plantearse en una negociación bilateral entre Cataluña y el Gobierno central. También cuestionó que el aumento de la población inmigrante dispare la necesidad de recursos.

Areces afirmó, en lo que pareció una clara alusión a Cataluña, que la reforma del modelo debe abordarse en un «marco multilateral y sin aceptar imposiciones que vengan de una comunidad que, con todo el respeto, tendrá su punto de vista, pero las demás tenemos que poner también encima de la mesa nuestra propia visión».

Respecto a la inmigración también fue claro: «El inmigrante produce gasto, pero produce ingresos, aumenta la población activa y, por tanto, genera recursos. Lo que produce en el sistema sanitario y en el social una demanda considerable que hay que tener en cuenta es tener un amplio porcentaje de población que no sólo es mayor de 65 años, sino que está sobreenvejecida».

Álvarez Areces también quiso precisar el sentido de las palabras que pronunció el viernes en una comparecencia en la Junta General. Aclaró que el Gobierno «no va a negociar en el Parlamento los planteamientos que defenderá en la reforma del modelo de financiación». El Presidente puntualizó que cuando respondió a IU que buscaría el respaldo de la Cámara se refería «a un concepto de compartir información y de compartir criterios, no de negociación. Textualmente, el Presidente afirmó el viernes: «El Gobierno buscará el respaldo pleno de esta Cámara».