Oviedo, Alejandro ÁLVAREZ

La nueva autovía entre Oviedo y Gijón (la AS-II o «autovía industrial», construida sobre la vieja carretera entre ambas ciudades) ha logrado en su primer año de funcionamiento romper la barrera de los 20.000 vehículos diarios.

Cada jornada, la vía es utilizada según datos provisionales, a la espera de conocer las cifras oficiales -que, en principio, serán hechas públicas la próxima semana por Itínere, la empresa encargada de su explotación- por unos 20.500 vehículos, entre ligeros y pesados. Unos números que entran dentro de las estimaciones más optimistas del Principado.

El Gobierno regional había estimado cuando se inauguró esta nueva vía, hace ahora un año, que los primeros tres años rodarían por la infraestructura una media de entre 18.000 y 25.000 vehículos al día. La intensidad, siempre según las previsiones del Gobierno asturiano, iría en aumento, hasta situarse en los 27.000 en 2010, 34.000 en 2015 y 40.000 en 2025. Hasta el momento, el pronóstico se va cumpliendo según lo establecido.

El último dato publicado sobre los flujos de tráfico de esta autovía, el de los primeros nueve meses de su funcionamiento, hecho público en enero, situaba el tráfico medio diario en torno a los 18.995 usuarios, con picos en los accesos a Oviedo, en hora punta, de hasta 40.000 vehículos. Ésta cifra continúa manteniéndose más o menos estable.

El Principado calculaba que con la puesta en marcha del desdoblamiento de la AS-18 al menos el 20 por ciento del tráfico que actualmente utiliza la «Y» basculase hacia la nueva autovía. El consejero de Medio Ambiente, Francisco González Buendía, destacó por entonces la importancia de esta la vía para descongestionar el tráfico en la zona central.

En este punto, la realidad no es tan optimista. El Ministerio de Fomento ha reconocido que el descenso del tráfico en la «Y» entre Oviedo y Gijón es «inapreciable». Es más, el Ministerio que dirige Magdalena Álvarez ha augurado un incremento en el volumen de circulación en el futuro. La ejecución de otra autovía (la AS III, entre Avilés y Langreo) prevista por el Ejecutivo regional puede ayudar a aliviar el tráfico.