Síguenos en redes sociales:

«El Inmortal», un castropolense que encarnó el espíritu de victoria

La entrega de hoy narra la historia del condecorado héroe que sobrevivió al fusilamiento

«El Inmortal», un castropolense que encarnó el espíritu de victoria

Oviedo, M. I. S.

Antonio García-Monteavaro, soldado castropolense, encarna el espíritu de resistencia que dio la victoria a España contra el invasor francés a comienzos del siglo XIX. Su biografía y los motivos que justificaron su sobrenombre -«El Inmortal»- se relatan en el fascículo número 44 de la obra «La Guerra de la Independencia en Asturias», que hoy se entrega con LA NUEVA ESPAÑA.

Condecorado y premiado en las Cortes de Cádiz, «El Inmortal» se ganó el tratamiento en una extensa hoja de servicios como combatiente que acaso haya tenido el episodio más sorprendente cuando fue hecho prisionero y sobrevivió, pese a ser arcabuceado por los franceses. «Recibió cuatro balazos», relata el fascículo de hoy, «y permaneció 36 horas tendido, aunque consiguió sobrevivir, siendo recogido por un pastor que le socorrió y curó las heridas». Volvió a alistarse para luchar y «tres meses después de que los franceses lo hubiesen fusilado, Antonio García cogió prisionero al comandante que había mandado arcabucearlo; lo sometió a la misma prueba de fuego, pero el francés murió».

Fue ésta sólo la más visible de las acciones que ganaron el sobrenombre y el reconocimiento de las Cortes para este castropolense nacido en 1791 en Castañeirúa, parroquia de Piñera. Formando parte de los Húsares de Castilla, participó, entre otras, en las acciones siguientes: «En la de Balmaseda recibió un balazo; en la de Oviedo, herido de una estocada; en la de Mondoñedo, herido de un balazo; en la batalla de Lugo, donde fue herido de tres estocadas...». Aún lucharía contra los absolutistas en 1820-1823 y participó en la primera guerra carlista antes de fallecer en La Coruña en 1841.

Pulsa para ver más contenido para ti