La multinacional ArcelorMittal afirmó hoy que "no cabe duda que una vez reabierto el horno alto B de Veriña, el impacto del Expediente de Regulación de Empleo en las instalaciones asturianas será mucho menor". Fuentes de la compañía recordaron que siempre se ha destacado que se trataba de "un ERE flexible que se ajustaría a las necesidades de cada instalación".

"No cabe duda que con mayor carga de trabajo el impacto del ERE será menor", destacó un portavoz de la compañía a Europa Press, aunque añadió no obstante que las mismas fuentes indicaron que por el momento no se ha evaluado en cifras la reducción del impacto.

Por otra parte desde la multinacional indicaron que desde la parada del horno alto B, el pasado mes de mayo, se han llevado a cabo labores de mantenimiento de manera constante.

"Desde el día que se dejó de producir se han estado haciendo trabajos técnicos vinculados a la instalación, con especial atención al sistema de refrigeración del horno. Lo que se ha hecho es mantener en funcionamiento los cilindros que a su vez mantenimiento el interior del horno caliente evitando de ese modo que se dañe el refractario que recubre el interior, además de otros muchos trabajos menores", destacó el portavoz de la multinacional.

Volver a poner en funcionamiento el resto de instalaciones, en principio no más allá del sinter D, cuya producción va muy ligada a la del horno alto B y que permanece parado desde que se parase esta última instalación.

En cuanto a la puesta en funcionamiento del resto de instalaciones paradas en la factoría de Avilés, la compañía aún no tienen fecha concreta. En estos momentos están paradas la Línea 1 de galvanizado; la línea de pintura y cuatro de las ocho baterías de coke, cuyo arranque sigue pendiente de la evolución de la demanda.

EUROPA PRESS