La visita de Zapatero a Rodiezmo no pudo ser más decepcionante para Asturias. Ni una sola palabra sobre los problemas y las preocupaciones de nuestra región.

En resumen, Rodríguez Zapatero hizo una de sus famosas promesas, esta vez, subir las pensiones mínimas. Abróchense los cinturones los pensionistas, cuando Zapatero anuncia que va a subir las pensiones lo que va a pasar en realidad es que las va a bajar.

Me explico: José Luis Rodríguez Zapatero está elevando las cuentas públicas a un déficit y a un endeudamiento insoportable. Con la Seguridad Social sucede exactamente lo mismo.

Un país no puede soportar tasas de paro próximas al 20 por ciento y déficits públicos que van camino del 10 por ciento del producto interior bruto (PIB). Una economía así va directamente a la quiebra.

A no mucho tardar empezaremos a hablar de déficit del sistema de pensiones y será el propio Rodríguez Zapatero quien tenga que anunciar la reducción de las pensiones por la vía de la ampliación de la edad de jubilación, hasta los 70 años.

La actual generación de trabajadores en activo vamos a tener que trabajar cinco años más para pagar la incompetencia de Rodríguez Zapatero.

Eso sí, dirá que es cosa de la derecha insolidaria. Del mismo modo que le echa la culpa a los empresarios de la grave situación económica. Bien va un país que necesita crear actividad y empleo, que necesita empresarios y el presidente del Gobierno se dedica a hostigarlos y a subirles los impuestos. Pronostico también que, tras la subida de los impuestos a las rentas del capital, vendrá la subida de impuestos a las rentas del trabajo, es decir, a todos los asalariados.

Las consecuencias de la política de Zapatero son las siguientes:

1.º- Desempleo.

2.º- Subida de impuestos generalizada.

3.º- Reducción de las pensiones por la vía de la ampliación de la edad de jubilación.

En definitiva, un empobrecimiento del conjunto de la sociedad española y, sobre todo, de los trabajadores y de los pensionistas.