Ingeniero químico de la Universidad de Santiago de Compostela

Oviedo, Raquel L. MURIAS

Manuel Bao Iglesias, (Santiago de Compostela, 1936) es ingeniero químico por la Universidad de Santiago y participó en el estudio que la Universidad de Oviedo realizó para decidir cuál es la mejor opción para gestionar los residuos de Asturias una vez se haya agotado la capacidad del vertedero de Serín, en 2015. El estudio concluye que la incineración es la solución más idónea. El Gobierno del Principado aún no ha tomado una decisión en firme para resolver una cuestión que enfrente al PSOE con sus socios de IU, que rechazan abiertamente la incineración.

-Los ecologistas alertan del alto nivel de emisiones de dioxinas y toxina que se desprenden al aire en la combustión de basuras. ¿Es real este peligro?

-Las primeras incineradoras que se construyeron eran poco más que hornos de combustión. En las quemas se desprendían al aire dioxinas y toxina, pero nada que no estuviese previamente presente en las basuras. Hoy en día, ninguna incineradora que se construya sobrepasa los límites de emisiones establecidos por la Unión Europea. En un vertedero tenemos 3 gramos de dioxinas por cada tonelada acumulada mientras que esa misma cantidad incinerada desprende 0,5 gramos de dioxinas al aire.

-¿Cuánto contamina una incineradora?

-La emisión de dioxinas de la combustión de un cigarrillo es igual a la combustión de una incineradora en un año.

-¿Quién tiene la razón, el que le previene de las maldades del vertedero o el que le alerta del peligro de la incineración de basuras?.

-El problema del planteamiento de los ecologistas que defienden el vertedero es que saben que la incineradora resta puestos de trabajo porque se reduce la recogida selectiva, hay demasiados intereses creados. Pero los que aman el medio ambiente saben que la opción más ecológica es la incineración.

-Pero, entonces, ¿abandonamos la apuesta por el reciclaje?

-No. Hay que seguir fomentando la recuperación de residuos pero, hoy por hoy, no se puede hacer más de lo que se está haciendo porque el problema es mucho más complejo que separar las basuras en diferentes contenedores. Si todo el plástico fuese polietileno puro? pero no es así, tenemos una heterogeneidad de materiales que se mezclan y que llega un punto que ya no se pueden reutilizar. Entonces, ¿cuál es el problema de buscarle una utilidad energética quemándolo? Así evito utilizar petróleo.

-Toda incineradora necesita de un vertedero para almacenar las cenizas. ¿No es una solución a medias?

-Un vertedero convencional, como el de Serín, al que va a parar toda la basura urbana que no se puede reciclar, tiene muchos riesgos. Las gaviotas, las ratas y las alimañas desplazan los residuos a cientos de kilómetros, hay riesgo de combustiones espontáneas que producen emisiones muy peligrosas y contaminantes y, además, hay contaminaciones al suelo. Por muy bien sellado que esté un vertedero, como es el caso del de Serín, siempre hay objetos punzantes que pueden romper ese sellado y por donde se colará el agua contaminada al suelo. El vertedero que necesita una incineradora sólo acumula las cenizas y escorias de caldera, aunque estas últimas se pueden utilizar en construcción. Las cenizas ocuparían un 3% del vertedero convencional, con lo que el riesgo de contaminación disminuiría.

-Dice que detrás de la oposición de los ecologistas hay ciertos intereses creados, ¿y detrás de la postura de los químicos?

-Yo participé en el diseño de la planta de Sogama en Galicia, la sociedad que gestiona los residuos. No hay ningún interés, había que plantearse qué era más factible dentro de lo económico. Analizamos todas las alternativas, visitamos otras incineradoras, estudiamos la recuperación energética de otras zonas pero nadie es capaz de reciclar más de 24% y hay que buscar soluciones.

«Nadie ha conseguido superar el 24 por ciento de recuperación de basuras en el reciclaje»

«¿Cuál es el problema de buscar rentabilidad energética a un plástico que no se puede usar más?»