Oviedo, Luján PALACIOS

Los taxistas de Oviedo, Gijón y Avilés mantendrán hoy un paro laboral de dos horas en protesta por la liberalización del transporte de viajeros por carretera.

Un total de quinientos profesionales están llamados a secundar la huelga, que tendrá lugar de once de la mañana a una de la tarde, convocada por la Asociación de Empresarios de Autotaxi del Principado (Asotaxi). Los taxistas de la capital mantendrán además una concentración en el aparcamiento de estadio Carlos Tartiere.

Los profesionales protestan por la que consideran una medida perjudicial para su trabajo, toda vez que la intención del Gobierno de España de modificar el artículo 21 de la ley Ómnibus supondrá que los coches de alquiler con conductor puedan pasar a ejercer una competencia directa a los taxis. En la actualidad este tipo de servicios está regulado, sólo se puede ejercer en la comunidad autónoma en la que tengan su sede, y su número también se controla por ley.

Pero con la entrada en vigor de la nueva ley Ómnibus estos vehículos podrían empezar a trabajar en cualquier comunidad de España, al margen de su provincia de origen. Además, también se abre la puerta a que cualquier empresa pueda disponer del servicio, lo que haría la competencia de forma directa a los taxistas.

«Cualquier hotel podría tener una flota de coches de alquiler con conductor para sus clientes, y los taxis dejaríamos de tener una parte importante de trabajo», indica Marino Esteban Álvarez, presidente de Asotaxi en Asturias. A todo ello se añade «el bajón que ya de por sí estamos viviendo en los últimos tiempos, cada vez hay menos trabajo», subraya. Asturias cuenta hoy en día con unos ochenta vehículos de alquiler, que son utilizados sobre todo por empresas.

El Gobierno defiende, por su parte, la modificación de la ley en lo que respecta al alquiler de vehículos de motor con conductor, «que nada tienen que ver con el sector del taxi», por lo que «no tendría sentido» impedir la modificación legal por «presiones» de estos profesionales, subraya el Ejecutivo. Asimismo, niega que el polémico artículo 21 liberalice el sector del taxi, sino que «refuerza la seguridad jurídica de su regulación». Los taxistas, mientras tanto, esperan que las posturas se acerquen y la huelga no deba repetirse.