Oviedo, J. A. ARDURA

Asturias es una de las autonomías con mayor peso del empleo público, incluso por encima de Madrid, sobre el total de su población activa. El Principado es la sexta comunidad autónoma de España con mayor número de funcionarios respecto al conjunto de sus trabajadores, por delante, por ejemplo, de Madrid. El peso del empleo público sobre el porcentaje total se sitúa en la región el 16,8 por ciento, sólo por detrás de Ceuta y Melilla, Extremadura, Castilla-La Mancha, Canarias y Castilla y León, según los datos de la Seguridad Social.

Asturias cuenta en la actualidad con más de 60.000 funcionarios y empleados públicos, que se reparten de la siguiente manera entre las administraciones públicas: el Principado emplea a 35.781 personas, la Administración pública estatal mantiene en la región una plantilla de 11.060 empleados, mientras que los ayuntamientos disponen de una plantilla global de 10.585 funcionarios y personal laboral. Por último, la Universidad registra 2.885 empleos, según los datos del Ministerio de Política Territorial.

El peso del empleo público en Asturias, siempre comparado con el de su población activa, es idéntico al que registra la autonomía de Aragón. Tras el Principado se sitúan las comunidades autónomas de Galicia, Cantabria, Madrid, Murcia, País Vasco, Navarra, La Rioja, Baleares, Valencia y Cataluña, comunidad esta última en la que el peso de la plantilla pública supone un 10,6 por ciento de su población activa, prácticamente seis puntos menos que en el caso del Principado.

Esta cifra revela el alto grado de dependencia que existe en Asturias del empleo público que, en cambio, en Madrid se sitúa casi dos puntos por debajo, en el 15,1 de su población activa. Y es que la Administración regional se ha convertido en el principal empleador de la región, con una plantilla que se acerca a los 36.000 efectivos. La mayor empresa privada de la región es Arcelor, con unos 6.000 trabajadores. La asunción gradual de competencias ha convertido al Principado en la mayor «empresa» de la región con un volumen muy superior, incluso, al que alcanzó Hunosa en su época de mayor implantación, cuando tuvo 27.000 empleados.

De hecho, la Administración asturiana todavía incorporó en 2009 a 1.133 funcionarios de la administración de justicia en cumplimiento del traspaso de esa competencia, rubricado con la Administración estatal. El Principado destina más de un tercio de su presupuesto consolidado al pago de personal. En las cuentas de 2010, aprobadas a finales del pasado año, el capítulo de personal, que incluye funcionarios, laborales, estatutarios y el personal de las empresas del sector público, supone un gasto de 1.661 millones de euros respecto a un presupuesto consolidado de 4.600 millones de euros. Es decir, la Administración asturiana destina al pago de su personal un 36,1 por ciento de sus recursos económicos. Ese porcentaje revela que el Principado aunque prácticamente ha congelado su oferta de empleo público para 2010, para disgusto y queja tanto de IU como de los sindicatos UGT y CC OO, se ha visto obligado a aumentar el peso relativo de los gastos de personal, que el pasado año suponían el 34,8 por ciento de su presupuesto. El peso de los gastos de personal en la Administración regional ha crecido paulatinamente desde el año 2005, cuando ese gasto suponía el 34,7 por ciento del total del presupuesto.