Oviedo, M. J. IGLESIAS

El Ministerio de Medio Rural realizará más de 8.000 inspecciones en industrias agroalimentarias en lo que queda de año. Su objetivo es detectar prácticas fraudulentas, como la transformación de concentrados lácteos en leche líquida. Los ganaderos, sumidos en una crisis de precios desde hace más de un año, llevan meses reclamando este tipo de medidas de control. En este sentido, la decisión tomada ayer por el Ministerio puede considerarse una consecuencia directa de las movilizaciones llevadas a cabo por las organizaciones profesionales del sector durante la pasada semana.

El plan de inspección fue anunciado por el subsecretario del Ministerio de Medio Rural, el asturiano Santiago Menéndez de Luarca, tras la reunión de la conferencia sectorial y del consejo consultivo de Agricultura y Desarrollo Rural, en los que participó el consejero del Principado, Aurelio Martín. Según Menéndez de Luarca, las inspecciones trascenderán al sector lácteo y se extenderán a la carne, el aceite y el vino. En la conferencia de ayer, el Ministerio de Medio Rural distribuyó un total de 262 millones de euros para toda España, en ayudas para la ganadería y la industria agroalimentaria. 3,9 millones le corresponden a Asturias.

El grueso de la partida son casi tres millones de euros, incluidos en los programas de desarrollo rural con medidas de mejora de calidad de la leche y subvenciones a la cría de vacuno de carne de razas autóctonas en extensivo, que se lleva más de 700.000 euros.

Los responsables autonómicos y la ministra, Elena Espinosa, también analizaron la Política Agraria Común (PAC) más allá de 2013, la competitividad del sector agroalimentario europeo, el papel de la mujer en el medio rural y la forma de proteger la biodiversidad. Los consejeros pidieron que se simplifique la tramitación de las ayudas comunitarias.