Oviedo, J. A. ARDURA

El Principado tendrá que reducir su Presupuesto consolidado de 2010 en un 4 por ciento, aproximadamente, para cumplir el ajuste que le exige el Gobierno central como primera contribución a la reducción del déficit público. La Consejería de Economía trabajaba desde hace semanas en la elaboración de un plan de ajuste que obligaba a recortar 149 millones de euros, pero se ha visto obligada a incorporar, sobre la marcha, una cantidad adicional que puede rondar en torno a los 50 millones de euros. El Gobierno asturiano tiene que completar sus deberes en un plazo máximo de dos semanas para trasladar sus cifras al Consejo de Política Fiscal y Financiera, pero antes debe contar con el visto bueno de sus socios de Izquierda Unida, que empieza a estar molesta porque, de momento, no conoce los datos del documento que perfila su socio de gobierno.

El departamento de Economía, por el momento, se ha mostrado bastante parco sobre los detalles del ajuste. Apenas dejó caer que el ahorro de los primeros 149 millones saldría de la reducción de gasto corriente en todas y cada una de las diez consejerías, fundamentalmente en materia de personal, así como del redimensionamiento del sector público y del ahorro en gasto farmacéutico. Fuentes del Principado confirmaron a este periódico que el segundo «tijeretazo», forzado por Bruselas hace apenas dos semanas, se centrará en la reducción de los sueldos a los más de 35.700 funcionarios y empleados públicos de la Administración, que podría suponer alrededor de unos 50 millones de euros adicionales de ahorro. En total, unos 200 millones de euros que suponen recortar en un 4 por ciento un Presupuesto regional consolidado, que ascendía a 4.600 millones para sufragar los gastos del conjunto de la Administración regional y de todo su sector público.

La parte socialista del Gobierno se ha comprometido a presentar en el transcurso de la próxima semana los detalles del ajuste, al menos los concernientes al «tijeretazo» en los sueldos de los funcionarios y empleados públicos. Los sindicatos temen que el Ejecutivo esté buscando una fórmula para esquivar que el recorte salarial deba pasar por el Parlamento asturiano una vez que tanto sus socios de gobierno de IU como el PP han anunciado su intención de votar en contra de una reducción en el complemento autonómico de los sueldos de los empleados públicos. Las mismas fuentes indicaron que la resolución sobre los salarios podría ser aprobada en el seno del Consejo de Gobierno, un ámbito donde también Izquierda Unida plantearía su abierto rechazo.

«Manifestaremos nuestra oposición a cualquier medida que suponga una reducción de salarios para los trabajadores públicos, entre los que hay muchos mileuristas, en cualquier escenario donde se plantee», aseguraron fuentes de la coalición a LA NUEVA ESPAÑA. De tal forma, que la aprobación del ajuste se convertirá en una nueva reválida para las relaciones entre PSOE e IU. El consejero de Medio Rural, Aurelio Martín, recalcó ayer que su coalición no está en el Ejecutivo asturiano para que sean los más débiles quienes paguen la consecuencia de la crisis. «Hay muchos funcionarios que son mileuristas y hacen un gran trabajo», declaró el Consejero, que forma parte del Gobierno en representación de IU.

Aurelio Martín también pidió ayer que se entregue a la mayor brevedad la información económica del Principado. «Esperamos que se nos facilite lo antes posible la radiografía de la situación de este año», planteó Martín. IU ya señaló hace más de un mes que los principales recortes deberían centrarse en las partidas de gasto superfluo y también señaló que había mayor margen para el ajuste en las empresas y entidades del sector público que en consejerías relacionadas con la prestación de servicios básicos esenciales como la educación, la sanidad y la dependencia, entre otras.