Oviedo, M. J. IGLESIAS

Las ganaderías de la cornisa cantábrica deben ganar tamaño, fusionarse a través de sociedades familiares de ganaderos y «vender» una imagen conjunta para competir diferenciándose de otras regiones, a fin de frenar el declive, que se ha traducido en el cierre de casi 16.000 explotaciones entre 2001 y 2008.

Las propuestas están incluidas en el estudio «Acciones de futuro en el sector lechero en la cornisa cantábrica», realizado por los profesores de la Universidad de Oviedo Antonio Álvarez Pinilla y José Antonio Pérez, en colaboración con el Centro Nacional de Competencia Tecnológica de la Leche. El informe señala que no tiene sentido que compitan entre sí las regiones del Cantábrico cuando son «difícilmente diferenciables desde un punto de vista objetivo».

El informe aconseja fomentar la producción industrial de quesos, que complemente a la actual producción artesanal, «para competir en los mercados nacionales e internacionales». Para conseguirlo, los investigadores proponen «ganar en imagen, volumen y diseñar una acción comercial específica».

Otra medida para dinamizar la producción de leche es aprovechar mejor los pastos y forrajes, para rentabilizar tierras abandonadas a través de cooperativas. Los servicios de alquiler de maquinaria sería otra de las medidas para ahorrar costes a los ganaderos, que, según los profesores Pinilla y Pérez, requieren un programa específico de formación.

El estudio destaca que las medidas basadas en el pastoreo y la producción ecológica están entre las menos valoradas en el sector lácteo de la Cornisa. Los autores inciden en la necesidad de que estas cuestiones, ligadas al medio ambiente, adquieran mayor importancia.

El trabajo aconseja que las medidas propuestas estén lideradas por las cooperativas, desde el sector privado, con el necesario apoyo público. Además, no pasan por alto la necesidad de que los ganaderos sean más competitivos en el ámbito internacional.