Oviedo, Pablo GONZÁLEZ

Asturias se ha quedado como la única comunidad española en la que es legal consumir alcohol a los 16 años ante la sorpresa de médicos, la indignación de parte de los políticos y la preocupación de las familias. Y es que hasta que la Xunta de Galicia anunciara la semana pasada que ya tiene listo el anteproyecto de ley sobre el consumo de alcohol, gallegos y asturianos eran los únicos de todo el país que podían beber legalmente a partir de los 16 años, cuando en el resto de las comunidades sólo se puede consumir una vez cumplida la mayoría de edad.

En el Principado el debate sobre la necesidad de ampliar la edad legal de consumo de bebidas alcohólicas de los 16 a los 18 años se ha resucitado tantas veces como se lo ha llevado el viento. Por un lado, en las últimas legislaturas el afán legislador de la Junta del Principado ha sido escaso. Por otro, ni el PSOE ni en cierta medida sus socios de IU creen que un cambio normativo sea la solución al problemático binomio menores-alcohol.

Frente a estas posturas, las del PP y la de muchos ámbitos de la medicina. Carlos Galcerán, diputado regional del PP, considera «impresentable» la situación en la que ha quedado Asturias. «El Gobierno asturiano está enviando a nuestros jóvenes un mensaje equívoco y peligroso», señala. De todas formas, desde el PP se entiende que la lucha de las administraciones contra el consumo de alcohol a edades tempranas no puede quedarse «sólo en prohibir. Hay también que hacer énfasis en medidas de prevención y de promoción de la salud», apunta Galcerán.

Por su parte, la diputada de IU, Diana Camafeita, se pregunta: «¿Qué efectos tuvo el aumento de la edad legal de consumo en el resto de comunidades? ¿Se bebe menos?». La parlamentaria regional de la coalición entiende que lo primero «es educar a los jóvenes y a los adultos para que distingan entre el consumo y abuso», asevera. Desde IU se entiende que las medidas deben ser integrales, tanto preventivas como educativas, y que «cualquier decisión que se adopte debe hacerse consultando con los jóvenes».

Desde el ámbito médico, Eduardo Carreño, experto en drogodependencias, asegura que la situación asturiana es «una locura y una incoherencia». «Hay razones de todo tipo para elevar la edad de consumo a los 18 años, desde sociales y médicas a legales», destaca Carreño. «No hay que olvidar que el alcohol es una sustancia química que no causa los mismos efectos en un cerebro formado que en un cerebro en formación. Y el cerebro no acaba de madurar hasta los 21 años», advierte. Además, asegura que a determinadas edades «el consumo de alcohol está asociado al consumo de drogas como el cannabis o la cocaína».

¿Y qué opinan los padres? «No parece muy correcto que pase esto, pero la realidad es que al final, con edad o sin ella, si quieran comprar alcohol encuentran la manera», asegura Dolores Díaz, presidenta de la Asociación Asturiana de Nuevas Familias. «Lo principal es educar a los jóvenes en valores incompatibles con estas conductas y explicarles los riesgos, además de ofrecerles alternativas de ocio. El alcohol está en la calle y los padres no vamos a poder evitar que participen de él», sentencia Díaz.

«El Gobierno asturiano está enviando a nuestros jóvenes un mensaje equívoco y peligroso»

Carlos Galcerán

Diputado del Partido Popular

«Cualquier decisión que se adopte debe hacerse consultando con los jóvenes»

Diana Camafeita

Diputada de Izquierda Unida

«Hay razones legales, médicas y sociales para elevar la edad de consumo a los 18 años»

Eduardo Carreño

Médico

«Con edad o sin ella, si alguien quiere comprar alcohol encuentra la manera de hacerlo»

Dolores Díaz

Pta. de la asociación Nuevas Familias