Oviedo, J. E. MENCÍA

El PP asturiano -las direcciones locales de Oviedo, Gijón, Avilés y Mieres, la dirección regional del partido en Asturias y la de Nuevas Generaciones- hizo bloque ayer para emitir un duro comunicado en el que, tal y como adelantó LA NUEVA ESPAÑA, la formación política rechaza «una hipotética candidatura de Cascos a la Presidencia del Principado» al considerar que esta iniciativa constituye, de la forma en que se viene desarrollando, un grave «riesgo de ruptura interna» para el partido en Asturias.

«Un grupo de amigos personales de Cascos, que en el PP apenas se representan a sí mismos, se ha envalentonado y ha iniciado una dinámica de autohomenajes que nos recuerda al proceso que acabó con la creación de URAS y la ruptura del PP de Asturias hace doce años, de la que todavía están cicatrizando las heridas», recoge el comunicado que se reproduce íntegramente en la página siguiente, en esta misma sección del periódico. Éste, el «riesgo de una ruptura interna», ha sido el principal motivo que ha impulsado a los dirigentes del PP asturiano a movilizarse para rechazar públicamente cualquier opción de Francisco Álvarez-Cascos como candidato y atajar el clima de enfrentamiento que se ha generado en el seno de la organización política. La dirección del PP en Asturias considera que de otra forma se «volvería a las andadas recordando la cainita confrontación Marqués-Cascos que entonces nos llevó a la ruina política y electoral».

El PP asturiano critica duramente la actitud «revanchista» que han adoptado los partidarios de Álvarez-Cascos que, en su opinión, pretende «cargarse» de un plumazo a los cargos democráticamente elegidos. «Ese grupo de amigos de Cascos», a los que se aludía anteriormente, «que han perdido todos los congresos locales, está anunciando con todo descaro la futura liquidación de quienes legítima y democráticamente los ganaron», señala el escrito difundido ayer por el partido. Pero la responsabilidad de la situación de choque interno que amenaza al PP asturiano no es sólo del entorno del ex ministro, a juicio de los firmantes del comunicado, Cascos también la tiene porque «ampara y promueve esa intriga».

El PP defiende un «candidato que sume, no que reste, que respete los estatutos de nuestro partido y los resultados de nuestros congresos». «Este comunicado supone el último episodio que da fin a este culebrón (...) que sólo ha contribuido a perjudicar la imagen del partido», ratifica el escrito de la dirección.

El comunicado original, no así el que se pasó a la prensa en un primer momento, está firmado por Gabino de Lorenzo, alcalde de Oviedo y presidente del partido en el municipio; Luis Crego, secretario general del PP de Gijón (Pilar Fernández Pardo, la presidenta local, se encontraba en Madrid asistiendo al debate sobre el estado de la nación); Joaquín Aréstegui, presidente del PP de Avilés; Carlos Galcerán, presidente de la gestora que dirige el PP en Mieres; Fernando Goñi, secretario de organización del PP de Asturias (Ovidio Sánchez también esta fuera de la región), y Pablo Álvarez-Pire, presidente de Nuevas Generaciones del PP en Asturias. El PP asturiano quiso dejar claro por la tarde la identidad de los líderes que suscriben el comunicado al comprobar que en algunos foros digitales partidarios de la candidatura del ex ministro de Fomento se estaba calificando el escrito de «anónimo y clandestino».

La decisión de la cúpula popular en Asturias, adelantada por este diario, provocó ayer reacciones en algunos dirigentes de la formación política, aunque la mayoría optó por el silencio y se limitó a remitirse a los contenidos del comunicado. Entre los que se posicionaron: Joaquín Aréstegui, presidente del PP en Avilés y uno de los firmantes del comunicado, y Carmen Maniega, diputada nacional del PP. Ambos coincidieron al señalar que la candidatura de Cascos, «principalmente por la acción de los que se dicen sus partidarios, no es una candidatura de unidad, que es lo que señala el comunicado».