Arriondas,

María José IGLESIAS

Una ola de solidaridad sacudió ayer el Sella, entre Arriondas y Llovio. A las once de la mañana más de cien intrépidos palistas, muchos de ellos debutantes en el río, desafiaron el frío y saltaron a las canoas para secundar la convocatoria del III Descenso solidario de la Fundación Puentes del Mundo, presidida por el ovetense Ignacio Gómez-Sandoval y la Plataforma de Mujeres Artistas Contra la Violencia, que lidera la cantante asturiana Cristina del Valle.

El punto de salida fueron las instalaciones de la Escuela Asturiana de Piragüismo. El objetivo era remar para recaudar fondos destinados a la casa de acogida Mehwar de Belén, en los territorios ocupados de Palestina. El proyecto se enmarca en la campaña de la Plataforma por la Paz en Oriente Medio. Sus representantes, con Del Valle a la cabeza, llevarán hasta allí la recaudación el próximo diciembre.

Este año la prueba se celebró con menos «famoseo» que en las ediciones anteriores, pero con más conciencia social. Así lo manifestaron Gómez-Sandoval y Del Valle durante la lectura de un manifiesto contra la violencia de género realizada antes de la salida.

Aunque algunos no las tenían todas consigo, el diez veces campeón mundial de piragüismo en la modalidad de maratón, Manolo Busto, templó ánimos y se puso al frente de la expedición. Le acompañó Cristina del Valle. Su participación fue doblemente solidaria. Casi en la meta, en Llovio, la pareja renunció al triunfo que tenían en la mano para ayudar a un matrimonio con su hijo que acababan de volcar en el agua. El susto pasó, pero en el intervalo de tiempo empleado en la operación de auxilio varias canoas llegaron casi a la vez. No quedó claro quién fue el primero. A Busto no le preocupó demasiado perder el podium. «Esto no es una carrera oficial, lo importante, aunque suene a tópico, es participar y ayudar». Cristina del Valle, que la noche anterior ofreció un exitoso concierto en Zamora, confesó que lo suyo con el Sella fue amor a primera vista. «Nunca me había animado a bajar; repetiré».

A su lado, «Miss España» 2010, Paula Guilló Sempere, la alicantina que resultó elegida «Miss España» representando a Teruel, proclamaba que, tras su visita, ya es una enamorada de Asturias.

La ilicitana, de 20 años, 1,81 metros de estatura, impresionantes ojos azules y medidas perfectas de 88-60-90, compartió canoa con Ignacio Gómez-Sandoval y dejó claro que se apunta a cualquier deporte. «He jugado al voleibol; lo del remo es nuevo, pero me encanta».

El mundo de la música también estuvo representado por Raúl Quijano, uno de los componentes del grupo leonés «Café Quijano». Llegó conduciendo su Porsche y enseguida se aclimató al ambiente fluvial. Quijano aseguró que con tal de hacer el bien a la sociedad se apunta a un bombardeo. «Esto es mucho mejor, claro», bromeó.

El deporte asturiano estuvo representado por los palistas Emilio Llamedo, Javier Hernanz, Jana Smidakova y Graciela Pisonero, de la escuela de vela del Club Marítimo Astur de Gijón, que acudió con varios jóvenes alumnos. El Descenso finalizó con una espicha preparada por el cocinero Sergio Rama. El cazaautógrafos Ander Azcárate tampoco se perdió el sarao. Personajes no le faltaron.