Oviedo / Madrid, J. E. M.

Una de cal y otra de arena. El porcentaje de ciudadanos que padecen dificultades económicas para llegar a fin de mes alcanza su cota más alta en la región, un 48 por ciento, desde que comenzó la crisis, allá a mediados del año 2007, lo que no impide que los asturianos sean, tras aragoneses, navarros, vascos y cántabros, los españoles que menos apuros dicen pasar para mantener su hogar.

Así que casi la mitad de los asturianos sufre apretones económicos para pagar su hipoteca, pero el porcentaje está lejos del 75 por ciento de los murcianos que viven la misma situación o de la media nacional, situada en el 59 por ciento. Las cifras han sido elaboradas por el Instituto Nacional de Estadística (INE), acaban de hacerse públicas y se refieren al año 2009.

En la evolución temporal, la proporción de asturianos a los que la crisis ha provocado estrecheces en su vida diaria ha pasado del 43 por ciento en 2007 al 48 en 2009. No obstante, el guarismo está lejos del 54 por ciento que atravesaba los mismos problemas en el año 2004, curiosamente el mismo ejercicio en el que llegó al Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, que, según las encuestas, es para buena parte de los españoles el responsable de la crisis. La cifra nacional indica peor evolución: en 2004 era el 60,4 por ciento de los ciudadanos los que reconocían dificultades. Ahora son el 59 por ciento, siempre según el INE.

Por regiones, Asturias se incluye dentro del grupo de comunidades en las que sus ciudadanos menos perciben los problemas económicos generados por la recesión. La cornisa cantábrica y su entorno centran geográficamente la España que vive más desahogada. Aragoneses, navarros, vascos, cántabros y asturianos son los que menos estrecheces aseguran tener. En el otro extremo: murcianos, canarios y andaluces. La buena percepción de su economía que tienen los asturianos se refleja también a la hora de establecer el porcentaje de personas que viven por debajo del umbral de la pobreza. Sólo tres regiones tienen cifras más bajas al 12,8 por ciento que presenta Asturias: Navarra, el País Vasco y Aragón. La media nacional es del 19,5 por ciento.

Analizados aspectos como las vacaciones, la alimentación o la capacidad para afrontar gastos imprevistos, Asturias también sale bien parada. El 38 por ciento de los españoles reconoce que no puede permitirse ni una semana de vacaciones. En Asturias la cifra es del 29,2 por ciento. Y 1,7 de cada cien españoles sostiene que no puede comer carne o pescado dos veces a la semana. En el Principado la cifra es del 0,4 por ciento. Además, si el 34 por ciento de los españoles afirma no tener capacidad para afrontar gastos imprevistos, en Asturias es el 21,2 por ciento de los ciudadanos el que reconoce esa situación.

La explicación a este comportamiento debe buscarse en el alto grado de transferencias que percibe Asturias en concepto de pensiones y prejubilaciones, en la baja tasa de paro de la región y en el menor impacto que ha representado la crisis, debido en parte a que el Principado también rentabilizó el «boom» económico en menor medida que otras regiones españolas.