Villaviciosa,

Mariola MENÉNDEZ

Los inspectores sanitarios del área V (Villaviciosa, Gijón y Carreño) estudian presentar una denuncia contra el Principado por obligarlos a realizar funciones como inspectores de mataderos, una tarea para la que no están cualificados, según aseguran. Dado que estos inspectores son veterinarios de profesión, los servicios jurídicos del Colegio Oficial de Veterinarios de Asturias están estudiando iniciar acciones legales contra esta decisión de la Administración regional.

Los veterinarios esgrimen que para llevar a cabo la supervisión de reses que posteriormente pasan al consumo humano no basta con tener la titulación de Veterinaria. La propia normativa europea los obliga a realizar un mínimo de 200 horas prácticas junto a un veterinario oficial especializado en la inspección de mataderos. Los inspectores sanitarios en estos momentos efectúan sus controles en carnicerías, pescaderías, lonjas de pescado, colegios, comercios de alimentación, residencias de ancianos e industrias de fabricación de alimentos, por dar algunos ejemplos. Los veterinarios acusan a la Consejería de Salud de no cubrir las bajas de los inspectores de mataderos con profesionales de la misma cualificación de otras áreas de la región obligándolos a asumir responsabilidades que no les competen. Alertan de que se pueda poner en peligro la seguridad alimentaria de los consumidores. No es algo nuevo, ya que el Colegio de Profesionales del área IV (zona central de Asturias) ha iniciado un contencioso similar.