Varios miles de personas se han manifestado hoy por el centro de Oviedo para mostrar su rechazo a la política laboral del Gobierno, contra el incremento de la edad de jubilación desde los 65 a los 67 años, y frente a una reforma del sistema público de pensiones que puede empobrecerlas entre un 10 y un 30 por ciento.

Esta manifestación, una más de las convocadas por UGT y CCOO en cincuenta ciudades españolas, ha contado con la presencia del diputado nacional de IU Gaspar Llamazares.

Entre los asistentes también se encontraba la consejera de Bienestar Social y Vivienda, Noemí Martín, junto a otros líderes regionales de la coalición.

Los secretarios generales de UGT y CCOO de Asturias, Justo Rodríguez Braga, y Antonio Pino, tras una pancarta con un lema contra la jubilación a los 67 años, han encabezado la manifestación, que ha partido poco antes de las 12:30 horas de la Estación de Renfe y que, tras recorrer la calle Uría, ha concluido en la plaza de Porlier.

Con esta manifestación, según Pino, se da continuidad al proceso de movilización emprendido por los sindicatos mayoritarios desde la huelga general del 29 de septiembre ante un Gobierno que persiste en ampliar los recortes sociales.

En su opinión, se trata de pelear por conservar derechos sociales, de decir no a una decisión "indecente, antisocial y tremendamente injusta" como es la retirada del subsidio de 426 euros a 600.000 familias o de rechazar la reforma de las pensiones.

No cabe aumentar la prolongación de la edad de jubilación a los 67 años, según Pino, que ha dicho que no debería haber prisa por reformar la Seguridad Social porque tiene solidez, salvo que con los cambios propuestos se quiera alimentar la voracidad de los mercados y dar negocio a compañías de seguros y entidades privadas.

Ha advertido de que se seguirá elevando el proceso de movilización si se mantienen estas políticas o se intenta, por ejemplo, introducir el copago en el sistema público de salud.

Rodríguez Braga se ha sumado a estas críticas y ha asegurado que el Gobierno no está planteando ninguna reforma, sino simplemente recortes que exigen los mercados.

Ha añadido que no se trata sólo de elevar la edad de jubilación, sino que se pretende empobrecer la pensión, que puede bajar entre un 10 y un 30 por ciento, con lo que los fondos privados y entidades financieras entrarían en juego para complementarlas.

Para el dirigente regional de UGT, aunque el momento actual no es el adecuado para incrementar los derechos de los trabajadores españoles, sí lo es para defender su mantenimiento.

Llamazares también ha incidido en que con las movilizaciones de hoy los trabajadores y ciudadanos recuperan la calle ante un gobierno que ha traicionado sus compromisos sociales y electorales y sacrifica las pensiones públicas para congraciarse con los mercados y los fondos privados de pensiones.

Para el diputado de IU, será necesario acentuar cada día las movilizaciones para parar los pies a los mercados y a un gobierno que no tiene ya un programa electoral político, sino el de los mercados y capitales.

"Hay un abandono del gobierno socialista de todos sus compromisos electorales y si en los próximos días no se les para habrá congelación de la economía, mantenimiento de un grado muy alto de desempleo y políticas antisociales", ha afirmado.