Oviedo, L. Á. VEGA

Sergio Marqués, la víctima propiciatoria de la anterior crisis del PP, la que llevó a su expulsión del partido en el año 1998 y a la creación de la Unión Renovadora (URAS) al año siguiente, aseguró ayer que hay algunos paralelismos entre aquella situación y la actual. «En el fondo no es lo mismo, porque yo fui expulsado del PP, del Grupo parlamentario Popular, y se me hizo una moción de censura. Lo que se ha producido ahora es que una persona se ha sentido minusvalorada. Yo no hablé de montar un partido político hasta un tiempo después de la expulsión. Eso sí, las formas son parecidas, porque por el hábito se conoce al monje», indicó.

El presidente honorario de URAS vio más paralelismo con el «caso Verstrynge», que «acabó en el PSOE». Marqués profundizó más en la crisis de 1998: «Ese año, Cascos llegó a Asturias y soltó una de sus frases crípticas: "Prefiero partido sin Gobierno que Gobierno sin partido"». Ya se ve dónde ha quedado el partido ahora, convertido en la bayeta de fregar», sentenció.

«¿Formará Cascos un PP bis?», se preguntó Marqués, quien calificó de «vaguedades» el contenido de la rueda de prensa del ex ministro. «Quizás asistamos a la conversión de Damasco. No soy capaz de recordar una sola vez en la que Cascos haya adoptado un discurso tan regionalista. Arrepentidos los quiere Dios», concluyó.