Gijón / Oviedo,

A. RUBIERA / R. G. / L. Á. V.

José Luis iglesias Riopedre tampoco salió ayer de la cárcel ni parece que lo hará en los próximos días. Su familia y, sobre todo, él mismo se niegan a aceptar la imposición de una fianza cuya cuantía, 100.000 euros, consideran «absolutamente inadecuada». Un portavoz de la familia de Riopedre aseguró ayer que la instrucción que ha dado el propio ex consejero de Educación desde la cárcel es muy clara: «No se paga». El antiguo alto cargo socialista prefiere permanecer en prisión lo que haga falta antes que abonar una cantidad que considera injusta y desorbitada. Su letrado solicitará, presumiblemente la semana que viene, una reducción de esa fianza, en atención a la ausencia de medios económicos del ex consejero.

«La precaria situación económica, conocida por todos los miembros del tribunal, hace imposible que se pueda afrontar esa cantidad», explicó la familia del ex consejero. «Es titular de una única cuenta, compartida con su esposa, Teresa, donde dispone de una liquidez de unos 1.500 euros; sobre la vivienda principal de la familia pesa un crédito hipotecario y afronta además otro crédito personal», explicó ayer un portavoz familiar.

Pero, ¿cómo pueden Riopedre, el consejero mejor pagado del Gobierno de Areces, con un salario bruto que rondaba los 78.000 euros, y su mujer, funcionaria, atravesar por esta situación? Un portavoz familiar asegura que la precariedad económica de la pareja se debe a la «importante ayuda que tuvo que prestar el matrimonio a su hijo, cuya empresa de geotecnia vinculada a la construcción y al mercado inmobiliario estuvo a punto de desmoronarse. Todos los ahorros del matrimonio fueron a parar ahí, de tal forma que no tienen liquidez ni bienes para hacer frente a la fianza».