Los daños de los lobos en la cabaña ganadera asturiana van en aumento. En 2010 se registraron 3.625 ataques a reses en el Principado, lo que supone una cifra superior a la de 2009, cuando fueron 3.596 los animales atacados en Asturias. En 2008, los daños registrados en el Principado alcanzaron los 2.905 casos. Estos datos se presentarán hoy ante el Consejo del Lobo, un organismo que no se reunía desde julio de 2009. Los daños obligaron al Principado a desembolsar el año pasado un millón de euros para indemnizar a los propietarios de los animales atacados. Así, la Consejería propone para este año un programa que precisa medidas de control específicas para cada una de las sietes áreas en las que se registra presencia de lobos en Asturias.

El análisis elaborado por el Principado desgrana que es la cabaña equina la que, al igual que en años anteriores, sigue siendo el objetivo principal de los lobos que actúan contra el ganado. En 2010 sufrieron ataques 1.567 caballos, asnos y mulares, así como 834 vacas, 819 ovejas y 405 cabras. Los meses de mayor intensidad de ataques se corresponden con la primavera, siendo marzo y abril los de incidencia máxima. Otro pico se localiza a finales de verano, en el mes de agosto, aunque menos pronunciado que el de la primavera.

El programa del Principado analiza las siete áreas con presencia de lobos:

l Puerto de El Palo-El Esva. Es la segunda zona con más daños, se matarán doce lobos y se eliminarán dos camadas para «evitar la expansión del lobo».

l Zona noroccidental. Aquí, la Consejería no propone ninguna medida de control del lobo más que las batidas puntuales previstas en el plan de gestión y que se llevarán a cabo «en caso de elevada incidencia sobre la ganadería».

l Suroccidente. En lo que se considera zona 3 se matarán ocho ejemplares. «Aunque la incidencia de los daños sigue siendo baja, el incremento poblacional de lobos está teniendo su reflejo en el número de reses afectadas por los daños», concreta Medio Ambiente como justificación a la muerte de estos ocho animales.

l Zona centrooccidental. El programa actual de la Consejería contempla la eliminación de diez animales. Es la zona donde hay una incidencia más «alta» sobre el sector ganadero.

l Zona central. La incidencia de lobos sobre el sector ganadero también es alta. Se prevé la muerte de ocho lobos.

l Zona centrooriental. La Consejería ha registrado un descenso del número de ejemplares, situándose en tres en 2009, pero se ha producido un fuerte repunte en 2010. Por ello, se va a eliminar lobos en la zona de Ponga y en otros focos donde se han registrado numerosos daños. En total se acabará con la vida de siete lobos.

l Picos de Europa. El Principado explica que la incidencia del lobo sobre la cabaña ganadera fuera del parque está «contenida» y matiza que es importante establecer un cupo de dos ejemplares, para evitar la proliferación de daños en áreas muy localizadas.

La Consejería de Medio Ambiente ha anunciado que se llevarán a cabo medidas de control de la población en otras áreas sin gestión específica donde hay conflictos permanentes. El departamento que dirige Francisco González Buendía deja la puerta abierta a llevar a cabo más batidas, pero siempre garantizando la presencia del lobo en los montes asturianos.