Candidato de PAS-URAS a la Presidencia del Principado

Oviedo, J. L. SALINAS

Xuan Xosé Sánchez Vicente, nacido en Gijón en 1949, es candidato a la Presidencia del Principado por la coalición PAS-URAS. Político, escritor, ensayista y miembro de la Academia de la Lengua Asturiana, Sánchez Vicente ya sabe lo que es ser diputado en la Junta General; ahora trabaja para volver a entrar en el Parlamento.

-¿Cuál sería su primera medida como presidente del Principado?

-Ante todo, saber el estado real de las cuentas. Buscar después medidas de ahorro. Al tiempo, tomar medidas ejemplares de restricción del gasto de Presidente y consejeros. Inmediatamente, poner en marcha nuestras medidas para crear 15.000 empleos en cuatro años.

-¿Qué medidas tomaría para el fomento del empleo?

-La subvención de todos los empleos, sin condiciones ni personales ni respecto al tamaño de la empresa, con la condición de que no eliminen otro. Búsqueda de formas para abaratar el terreno industrial y encontrar fórmulas de alquiler. Un crédito bancario sindicado con aval del Gobierno.

-¿El sumario de la «operación Marea» influirá en los resultados electorales?

-Lo veremos. Observo un sospechoso silencio social. En cualquier caso, hay tanta corrupción que, de pesar e influir, será por acumulación.

-¿Los ciudadanos castigan poco la corrupción, la consideran inherente al poder político?

-La suelen considerar aceptable en los suyos e inaceptable en los otros, por desgracia.

-¿Perciben cierta desafección social hacia la clase política?

-Más en el discurso que en la realidad. Al final, con ganas o sin ganas, vota un número aproximadamente igual de ciudadanos.

-¿Qué resultado espera su partido para el 22-M?

-En primer lugar, un par de diputados o tres. En segundo lugar, tener la Presidencia del Gobierno, por ser la única fuerza que puede garantizar acuerdos en una situación que presumiblemente será muy complicada para llegar a ellos, tanto por insuficiencia de votos como por tensiones cainitas.

-¿A qué cree que se debe que los electores confíen poco en los partidos llamados «minoritarios»?

-La gente, en general, invierte poco en lo que más le debería interesar, la política. Pero, por otro lado, el vector central de la percepción de las propuestas y los partidos no es la verdad, no lo es tampoco la eficacia, ni siquiera el interés y el bolsillo. El vector central es la identificación emocional histórica y la capacidad de presencia, es decir, la propaganda, esto es, el dinero.

-¿Pueden convertirse la formación y la I+D en pilares de una nueva economía?

-Eso son sólo vectores necesarios, pero no suficientes. El elemento central de la economía es que exista gente con vocación empresarial.

-¿Es partidario del copago sanitario?

-Esa no parece la mejor forma. En todo caso, la sanidad requiere un profundo examen sobre la gestión, las compras, la limitación del gasto, etc. El objetivo es que es la sanidad siga siendo universal y gratuita.

-¿Hay que modificar la acción pública y el cuerpo de funcionarios del Principado?

-Hay que eliminar todos los organismos inútiles y superfluos y aquellos creados sólo para pompa y propaganda.

-¿Qué medidas aplicaría en gestión del territorio, demografía y población o medio ambiente?

-Apoyo a las familias, subvención para los hijos con pocos años, guarderías laborales. En medio ambiente, depuración de todos los vertidos, funcionamiento de todas las depuradoras, mejora de la calidad del aire.

-¿Y en materia cultural?

-Cooficialidad del asturiano. Modificación de la normativa sobre hórreos. Y convertir la cultura en una potente industria de promoción, atracción y captación de recursos.

-¿Cree que Asturias ha perdido peso en España?

-No pintamos nada. Fíjese, por ejemplo, que cuando llegan los premios «Príncipe de Asturias» los locutores dicen que están los «gaiteiros» y se toma «sidriña»; y que siendo la mayor potencia sidrera, quien atrae al turismo con la imagen de la sidra es Euskadi. Pero si no pintamos nada no es porque sea inevitable, sino porque es esa la práctica sumisa de los partidos centralistas.