Las derechas asturianas -Foro de Ciudadanos (FAC) y el Partido Popular (PP)- obtuvieron ayer, por primera vez en la historia democrática de la región, mayoría absoluta en unas elecciones autonómicas sumando, al cierre de esta edición y con el 98 por ciento escrutado, 26 diputados (16 de FAC y 10 del PP). A tenor de las declaraciones efectuadas ayer, tras conocer los resultados, por sus líderes, Francisco Álvarez-Cascos, de Foro, e Isabel Pérez-Espinosa y Gabino de Lorenzo, por el PP, unos y otros abren la puerta a un entendimiento. «Se acabaron las polémicas de campaña», señaló Álvarez-Cascos, para subrayar sus deseos de sumar ideas y esfuerzos a su proyecto de gobierno. Pérez-Espinosa también aseguró haber captado el mensaje de los asturianos, «que han demandado claramente un cambio que nosotros asumiremos y facilitaremos con altura de miras».

La derecha ya había gobernado en Asturias entre 1995 y 1999 de la mano de un PP capitaneado por Sergio Marqués. Sin embargo, aquel Ejecutivo ejerció las tareas de gobierno con mayoría simple y gracias a la falta de entendimiento entre los socialistas de Felipe González, encabezados por Antonio Trevín en Asturias, y la coalición de Izquierda Unida que dirigía Julio Anguita, encabezaba en la región por Gaspar Llamazares.

A este triunfo de las opciones conservadoras se une el éxito sin precedentes de Foro de Ciudadanos, el partido de Francisco Álvarez-Cascos, una agrupación nacida como tal el pasado 19 de enero -tras la negativa de Mariano Rajoy y de la cúpula regional a nombrar al ex ministro cabeza de lista del PP- que se ha revelado como la gran triunfadora de los comicios. Ha sido llegar y besar el santo. La formación, que logra un mayor número de escaños, disputa enconadamente con el PSOE el cetro de fuerza más votada, un galardón cuya titularidad seguramente no se podrá despejar hasta que se proceda al recuento de los alrededor de nueve mil votos emitidos por los emigrantes asturianos. Los socialistas obtuvieron ayer 15 diputados por cuatro de Izquierda Unida. Una cifra muy corta que deja a la izquierda a nueve escaños de los conservadores.

Asturias, tradicionalmente de izquierdas, sigue así la corriente nacional, donde el PP se ha convertido en fuerza ganadora en casi todas las comunidades autónomas.

Por municipios, los conservadores están en condiciones de gobernar con holgura Oviedo, Gijón,y Llanera. Si no hay acuerdo entre Foro de Ciudadanos y el PP -Cascos advirtió ayer, después de que Gabino de Lorenzo hablara de posibles pactos sobre asuntos concretos, de que no cambiará votos con nadie y de que las agrupaciones locales tendrán las manos libres para negociar en sus respectivos concejos-, los partidos podrían optar por dejar gobernar a la lista más votada y buscar acuerdos sobre materias específicas tanto en el Principado como en los municipios, aunque de esa forma los conservadores perderían las opciones de ejercer el gobierno en Gijón, donde los socialistas han sido los más votados.