Oviedo, Raquel L. MURIAS

Calma expectante. El primer día en la Administración pública asturiana bajo la gestión del nuevo Gobierno que encabeza Francisco Álvarez-Cascos (FAC) se desarrolló entre esos dos frentes: la calma y la expectación. La calma ante el aterrizaje del nuevo Gobierno y la expectación por los inminentes cambios que se acercan. Los funcionarios desconocen la cantera de la que tirará el cabeza de FAC para cubrir los puestos de confianza que quedan vacantes en la Administración regional.

Los cargos públicos aseguran que hay «incertidumbre» y que desconocen quiénes serán las personas que ocuparán los nuevos cargos de jefes de servicio y directores generales en el nuevo organigrama de las consejerías. De momento, Cascos ha llevado a cabo los nombramientos de nueve consejeros y seis viceconsejeros, pero quedan pendientes los rangos inferiores. Juan Gavira, secretario de la sección sindical de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios en Asturias (CSIF), explica que «hoy (por ayer) fue un día en que el funcionariado estuvo expectante, tenemos que ir viendo cómo se van rellenado los huecos con los que nosotros tenemos un trato directo».

Lo que sí explican los representantes sindicales de los funcionarios públicos asturianos es que desde el pasado mes de mayo (fecha en la que se celebraron las elecciones regionales) y hasta que el pasado 18 de julio el nuevo Gobierno asturiano inició su actividad, la Administración pública asturiana trabajó a medio gas, favorecido esto también por la difícil coyuntura económica, que tiene los proyectos al ralentí. «Se notó el parón durante estos tres meses. Desde que se conocieron los resultados sólo se han sacado adelante los temas que estaban a la espera de un mero trámite burocrático, de una firma», aclara Gavira.

Amparo García Villar, coordinadora del sector autonómico de funcionarios y personal laboral del sector autonómico de Comisiones Obreras (CC OO), afirma que «sí que puedo decir que hay cosas aplazadas, incluso concursos de personal funcionario. A nosotros los nombramientos de consejeros y viceconsejeros no nos afectan directamente, y a día de hoy (por ayer) los jefes de servicio y directores generales del Gobierno saliente aún no habían cesado». García Villar concreta alguno de los asuntos que han quedado a la espera, «la transferencia en la gestión del parque natural de los Picos de Europa al Principado». Marisol Gómez, secretaria de la federación de servicios públicos de UGT también reconoce que se mascan cambios, pero «estamos a la espera, no sabemos quién va a venir», concreta. «Cuando se conozcan los interlocutores, que son los jefes de servicio y los directores generales veremos qué pasa», avanza. La portavoz de UGT asegura que ella no ha percibido ningún parón en la Administración en estos casi tres meses de transición entre uno y otro Gobierno. «Hay cosas que hay que hacer independientemente de los cambios políticos, y no se han descuidado», matiza. Javier Álvarez Villa, portavoz del Conceyu por Otra Función Pública, asegura que el cambio de las estructuras orgánicas «va a tardar un tiempo, pero nosotros ya hemos emitido un comunicado para que Cascos, ya que quiere una Administración transparente, derogue la "ley de blanqueo" aprobada en diciembre». Mientras tanto, los funcionarios están en modo espera.