Oviedo, Sergio GRANDA

Un Gobierno con escasa representación femenina. Ésa es la valoración que hacen las asociaciones de mujeres asturianas sobre el Ejecutivo diseñado por Francisco Álvarez-Cascos. Sólo tres mujeres ha colado el líder de Foro entre los nueve consejeros y cinco viceconsejeros que ha designado hasta el momento. Muy lejos de las siete mujeres que formaban parte de la primera línea del último Gobierno de Vicente Álvarez Areces, con diez consejerías y siete viceconsejerías. Por ello, el organigrama del Gobierno de Foro irrita a las responsables de las asociaciones de mujeres del Principado, que lo ven como un peligroso paso atrás en la igualdad.

«Me parece inadmisible. Un terrible retroceso en la paridad». Son palabras de Maricusa Argüelles, representante de la Asociación Mujeres por la Igualdad en el Consejo Regional de la Mujer. Argüelles está tan molesta que llega a asegurar que «el actual Gobierno de Álvarez-Cascos no empieza nada bien» y que su asociación no va a quedarse «de brazos cruzados».

Algunos mantienen la esperanza de que haya un avance en cuanto a leyes para paliar la falta de representación femenina en el Gobierno de Cascos. Ángeles Castellano, coordinadora de programas de la Asociación Xurtir, considera ése, la reforma legal, uno de los posibles cauces para remendar la falta de paridad. No es el caso de la Asociación de Mujeres por la Igualdad del Valle del Nalón, donde recuerdan que ya se han hecho leyes de igualdad y, por tanto, «ya había un punto muy beneficioso para la igualdad en Asturias, que habría que respetar».

Adela Rodil, presidenta de la Asociación de Mujeres Eva Canel de Gijón, asegura que «tres es un número ínfimo para el Ejecutivo del Principado» y que, «si es por capacidad, las estadísticas nos dicen que debería haber más mujeres en los altos cargos del Gobierno». Junto a las críticas también hay asociaciones femeninas que prefieren dar un margen de confianza al actual presidente. Es el caso de Asunción Naves, presidenta del colectivo Les Filanderes, quien afirma estar «a la expectativa y dejar un tiempo para ver las decisiones del presidente de Asturias». Una de las preocupaciones que la asociación Les Filanderes expone es el futuro del Instituto Asturiano de la Mujer. «Es una incertidumbre; nunca oí a Cascos hablar sobre política de mujeres», afirmó.

Las distintas asociaciones de mujeres asturianas coinciden en que, cómo mínimo, no se debe dar un paso atrás en lo logrado en materia de igualdad política. «Si aguantan lo que se ha conseguido hasta ahora, me doy por satisfecha», asegura Adela Rodil. En esta línea, la ex concejala de la Mujer del Ayuntamiento de Laviana Maricusa Argüelles afirma que «en Asturias se ha avanzado muchísimo en política social durante los últimos años». Menos optimista es el punto de vista de la presidenta del colectivo Les Filanderes, que indica un progreso todavía insuficiente en lo que se refiere a políticas de igualdad: «Se han hecho avances importantes en política social, aunque no tanto en política de la mujer», aseguró.

El debate entre los que prefieren instaurar un número base de cargos femeninos frente a los que se decantan por dejar que sean los más válidos los que detenten los cargos ha vuelto a tomar fuerza con el anuncio de las siete viceconsejerías de Cascos.

En muchas de estas asociaciones se reconoce que las cuotas que fijan un porcentaje mínimo de mujeres en los gobiernos son una medida correcta para evitar ejecutivos poco femeninos. «Las cuotas son importantísimas y hasta que en el futuro no se consiga una paridad real no se deberían suprimir». Así de rotunda se mostró Maricusa Argüelles al hablar del asunto. Estas cuotas también fueron comentadas por la Asociación Xurtir, de la que su coordinadora de programa, Ángeles Castellano, declaró: «Son medidas muy efectivas pero deben ser transitorias, como paso para llegar a la igualdad». Desde la Tertulia Femenina «Les Comadres», una portavoz, que optó por el anonimato, criticó duramente la poca representación femenina en el Ejecutivo de Foro: «La prueba palpable de que no se ha respetado la paridad es está poca representación de la mujer». En este sentido, no todos los colectivos de mujeres se muestran a favor de la imposición de cuotas. Desde la Asociación Eva Canel, Adela Rodil está convencida de que «se debe buscar a quien más capacitado esté para desempeñar el cargo, aunque si esto fuera así, habría más de tres mujeres en el Ejecutivo asturiano».

El diseño de gobiernos como el de Foro Asturias ha levantado la alerta de muchas de estas asociaciones, que lo ven como un bache frente a muchos años de lucha por la igualdad de la mujer. Maricusa Argüelles afirma que, a pesar de no haber puesto expectativas sobre el actual Gobierno, sí que se sienten tremendamente decepcionadas por el escaso e insuficiente número de mujeres en la Presidencia de Cascos. Además, una portavoz de la Tertulia Femenina «Les Comadres» recuerda «el gran golpe que supuso a la igualdad» suprimir el Ministerio de Igualdad del Gobierno central para que fuera absorbido por el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad. A juicio de este colectivo de mujeres, éste fue el primer gran error que podría echar por tierra los logros conseguidos durante los últimos años.

«Es inadmisible, un preocupante retroceso en la paridad»

<Maricusa Argüelles >

Mujeres por la Igualdad

«Las cuotas son efectivas, pero deben ser transitorias para llegar a la paridad»

<Ángeles Castellano >

Asociación Xurtir

«El futuro del Instituto Asturiano de la Mujer es una incertidumbre»

<Asunción Naves >

Colectivo Les Filanderes

«Se debe buscar a quien esté más capacitado para desempeñar el cargo»

<Adela Rodil >

Asociación Eva Canel