Oviedo, P. G.

La decisión del presidente regional, Francisco Álvarez-Cascos, de Foro Asturias, de adelantar al próximo 25 de marzo las elecciones autonómicas, sólo diez meses después de las anteriores, no sólo ha cogido con el pie cambiado a las fuerzas políticas de la oposición, también a la mayoría de los altos cargos del Gobierno. Varios de ellos aseguran que el adelanto electoral «no se les ha consultado», y que en caso de que las urnas sitúen a Foro en la oposición, tendrán muy difícil reincorporarse a sus anteriores puestos de trabajo.

Quienes se quejan afirman que Cascos tomó la decisión de adelantar las elecciones consultando «sólo con su reducido círculo de confianza», aunque se informase al Consejo de Gobierno. De estos altos cargos, que no quisieron identificarse, algunos abandonaron puestos de relevancia en empresas con la promesa de que su cargo duraría al menos cuatro años. Al final, en algunos casos han sido poco más de seis meses. Otros son funcionarios que, de tener que reincorporarse a su función anterior, seguramente no podrían recuperar el mismo puesto.

Por el momento, la comisión directiva de Foro tiene previsto aprobar mañana la candidatura electoral, que según fuentes de Foro se haría pública el sábado. Varios de los alcaldes de FAC y sus parlamentarios nacionales -el senador Isidro Martínez Oblanca y el diputado Enrique Álvarez Sostres- ya se han reunido para definir el perfil de los posibles candidatos. Al frente estará el presidente y líder de Foro, Francisco Álvarez-Cascos.

En el artículo 25 del reglamento de Foro Asturias se establece que entre las competencias de las comisiones directivas se encuentra «elaborar las listas electorales». La comisión directiva regional está conformada por el presidente del partido, Francisco Álvarez-Cascos, el secretario regional, los parlamentarios autonómicos y nacionales y los presidentes provinciales.