El presidente del Principado, Francisco Álvarez-Cascos, ha pedido hoy al Gobierno de Mariano Rajoy que "no traslade a los demás lo que uno no practica" y que, por lo tanto, no lleve a las comunidades autónomas los problemas que le son propios.

En una rueda de prensa, el jefe del Ejecutivo asturiano ha afirmado que es una contradicción que el Gobierno de España relaje el objetivo de déficit para este año ante la Unión Europa y que a la vez exija a las autonomías que lo limiten al 1,5 por ciento.

"Eso de pedir a los demás lo que uno no practica no parece una política muy ejemplar y trasladar a los demás las soluciones de los problemas propios no es asumible y, desde luego, no lo es para el Principado en el caso concreto de los fondos mineros", ha subrayado.

Cascos ha incidido en que a la hora de desagregar el déficit que la Unión Europea ha marcado para el conjunto del Estado entre la administración central, las autonomías y los ayuntamientos, el Gobierno central "incumple el principio de lealtad institucional".

En su opinión, "no es de recibo ni aceptable que para corregir el déficit del Estado se traslade éste a las autonomías" y que, por ejemplo, en nombre de la política de estabilidad en España, se recorten los fondos mineros.

El presidente asturiano ha recordado que buena parte del recorte de 1.100 millones de euros fijado para el Ministerio de Industria va a hacerse sobre los fondos mineros, de los que en buena parte se beneficia Asturias en contrapartida por reducir el sector carbonero en 9.000 trabajadores y en tres millones de toneladas de carbón en los últimos años.

Ante este ajuste, el Plan de la Minería fue la respuesta del Estado para corregir un desequilibrio territorial, una cuestión que, según el presidente del Principado, está recogido en el artículo 138 de la Constitución y no se puede conculcar, por lo que considera que los fondos mineros no se pueden recortar.

Así, ha incidido en que el ajuste de fondos mineros "no es asumible para Asturias" y que para su mantenimiento recurrirá al Tribunal Constitucional "como última instancia", si es necesario, aunque también ha admitido que espera no tener que llegar ni a la primera instancia de los tribunales y que se pueda resolver mediante el diálogo y la colaboración institucional.

"Desde el punto de vista político y social no es aceptable, pero desde el jurídico y constitucional tampoco encaja en la aplicación de los principios", ha dicho el presidente.

Sobre la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera que se celebra hoy, Álvarez-Cascos ha evitado pronunciarse sobre las propuestas que llevará Asturias y se ha limitado a señalar que se acude a ese foro con un "espíritu constructivo y muy claro de defensa de los intereses del Principado".

EFE