Oviedo / Madrid,

J. A. A. / Agencias

Los ayuntamientos tendrán que seguir apretándose el cinturón, pero, a cambio, el Gobierno se compromete a actualizar sus competencias. Éste es el mensaje que trasladó ayer el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, al presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias, Carlos Zoido, con quien acordó mantener para este año el mismo techo de déficit que ya se había fijado en 2011, el 0,3 por ciento.

Las cifras dejan a los municipios un margen de maniobra muy escaso en un contexto marcado por la caída de ingresos, pero abren la puerta de la solución a un problema que los ayuntamientos vienen denunciando desde el inicio de la crisis, la falta de financiación para servicios que hasta ahora prestaban sin ser de su competencia. El objetivo del compromiso con la austeridad no sorprende demasiado a los municipalistas asturianos, la necesidad de un nuevo marco competencial tampoco. El presidente de la Federación Asturiana de Concejos reclamaba ayer, en declaraciones a LA NUEVA ESPAÑA, la necesidad de que el gobierno central defina las competencias entre administraciones.

El Gobierno sumó ayer a los ayuntamientos al objetivo de déficit para 2012 y concretó los detalles del plan para que los municipios comiencen el 1 de mayo a pagar a los proveedores unos 18.000 millones de euros en facturas pendientes.

El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, cerró con los representantes de los ayuntamientos la ronda que ha mantenido con todas las administraciones para establecer los principios de estabilidad presupuestaria del presente ejercicio. También aprovechó el encuentro para aclarar que el pago a los proveedores estará «más en función» de la antigüedad de las deudas que de posibles quitas negociadas. El Ministro aseguró que este plan ha sido «muy bien recibido» por los ayuntamientos y matizó que no ha habido ninguna intención de establecer quitas obligatorias, fuera de aquellas que se produzcan dentro de la «capacidad de negociación» entre las administraciones y los proveedores.

Las corporaciones tienen hasta el día 15 de este mes para elaborar los listados de facturas pendientes de pago y quince días para presentar un plan de viabilidad a 10 años para el saneamiento de sus cuentas. Los proveedores «con toda seguridad» empezarán a cobrar a partir del 1 de mayo de las administraciones, según Montoro, gracias a este crédito financiado a diez años, con dos años de carencia y un «interés accesible». El titular de Hacienda definió este plan como «una inyección decisiva» para ver «otra cara» a la crisis y anunció que en los próximos meses impulsará una reforma del marco competencial de las distintas administraciones. La clarificación de competencias es una de las demandas históricas de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), que llegó a cifrar en 6.000 millones de euros el coste que suponían las denominadas «competencias impropias» para los ayuntamientos. El presidente de la FEMP, Juan Ignacio Zoido, alcalde de Sevilla, valoró este compromiso y confía en que en la próxima reunión de la Comisión Nacional de Administración Local ya se aborde esta cuestión.

Zoido confirmó asimismo que el Gobierno central se ha comprometido a entregar próximamente a los ayuntamientos 1.000 millones de euros correspondientes al 50 por ciento de las liquidaciones positivas de las entregas a cuenta correspondientes al ejercicio de 2010. Además, durante el encuentro se ha reiterado el compromiso del Gobierno de ampliar de cinco a diez años el plazo para devolver a Hacienda los 6.000 millones que los ayuntamientos le deben por las liquidaciones negativas de los ejercicios 2008 y 2009. El presidente de la Federación Asturiana de Concejos, Antonio Luis del Solar, alcalde de Pravia, sostiene que los ayuntamientos ya empezaron sus deberes el pasado año. «Los municipios fuimos los primeros en respetar el criterio de la austeridad, nuestra desviación fue mínima, de unas décimas», comentó tras urgir al Gobierno a elaborar un nuevo marco sobre las competencias de las administraciones.