Oviedo, E. M.

Sonia Fandiño, una alumna de la Escuela de Enfermería de Gijón, ha llevado ante el Tribunal Superior de Justicia de Asturias a la Universidad de Oviedo para solicitar 47.556,12 euros por los trastornos sufridos a raíz de la adaptación de su antigua diplomatura al nuevo grado del Espacio Superior de Educación Europeo. La perjudicada aduce que fue obligada a cambiarse al nuevo plan tras dejar pendiente una asignatura de primero, de la que se dio de baja «después de que la secretaría del centro me dijera que no acarrearía ningún problema». Sin embargo, meses después se vio forzada a matricularse en la nueva titulación, lo que le acarrea dos años más de estudios, «por una imposición arbitraria, que no recoge ninguna norma».

«Reclamo el dinero en concepto de gastos de matriculación y manutención, daño moral y, sobre todo, porque ahora ya estaría trabajando como titulada en una empresa que me lo había prometido», afirma. Fandiño ha ganado ya dos juicios en instancias inferiores, pero las sentencias sólo le reconocen una indemnización de poco más de siete mil euros. Además, asegura haber mantenido en su día varias reuniones con responsables académicos, entre ellos la ex vicerrectora Susana López Ares. Tras los fallos favorables, la Universidad le permitió regresar a la diplomatura, pero «sin especificarme asuntos clave como qué asignaturas me convalidaban». Por eso, ha decidido continuar en el grado.