Sevilla, Efe / E. P.

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, afirmó ayer que la reforma de la Administración «no debe dar miedo a nadie» y que «ningún funcionario tiene nada que temer», si bien ha dejado claro que la administración pública «no es una oficina de contratación».

Montoro sostuvo que hay que cambiar el concepto «equivocado» de la función pública, en el sentido de creer que quien saca una oposición ya lo tiene todo hecho y un empleo seguro. Abogó por abandonar esa mentalidad porque quien trabaja en un servicio público «se lo tiene que ganar como todos los españoles» e incluso de forma más exigente, y ha apostado por una administración eficiente que evite la superposición de competencias y, por tanto, el despilfarro.

«Parece que estamos ante oficinas de colocación y eso es un concepto equivocado», advirtió el Ministro, que insistió en que los ayuntamientos «no están para contratar a gente, sino para contratar a gente que sirva a los ciudadanos». El Gobierno, aclaró Montoro, pretende que las administraciones lleven a cabo planes de ahorro, supresión de organismos y que el sueldo de los empleados no se reduzca «sino es para dar más viabilidad a un ente público que pueda tener sobredimensión de su plantilla».

El Ministro también afirmó que de los planes de viabilidad requeridos a los ayuntamientos para acogerse al plan de pago a proveedores «no se desprende una situación negativa» para los funcionarios y concluyó que «el que tiene que tener miedo es el que ha sido contratado para tener los brazos cruzados».

Los proveedores dispondrán de cinco días en abril y otros cinco en mayo para reclamar todas las facturas que los ayuntamientos no hayan incluido en el listado que enviaron al Ministerio de Hacienda. Las pymes y autónomos con facturas anteriores a 2012 deberán entregar certificados individuales con el importe de la factura al Ayuntamiento correspondiente que, luego, los remitirá a Hacienda. El Ministerio pretende iniciar los pagos a lo largo del mes de mayo.