Santiago del Monte,

Ana Paz PAREDES

El primer vuelo de la compañía irlandesa Ryanair con destino a Barcelona, de donde había salido previamente hacia Asturias, despegó ayer de las pistas del aeropuerto de Asturias a las 08.35 horas, cumpliendo el horario previsto. Éste podría decirse que fue el vuelo inaugural de esta compañía de bajo coste que inició su servicio en el Principado ayer. El segundo, con destino a Madrid, despegó a las 08.55 horas. Los otros dos vuelos a Barcelona y Madrid son a las 20.55 horas y las 23.05 horas, respectivamente. El último enlace desde la capital de España, programado para las 21.20 horas, tenía previsto al cierre de esta edición un retraso de casi dos horas, atribuido a las demoras acumuladas por una huelga de controladores aéreos en Francia.

Los primeros asturianos que embarcaron en este vuelo inaugural de Ryanair desde Asturias, con destino a Barcelona, fueron dos empresarios de Gijón: Isaac Escudero y José Ángel García. Ambos se mostraron encantados con la apertura de esta línea que consideraban muy necesaria para cuantos tienen que desplazarse en avión por motivos de trabajo. «Antes había que ir hasta Valladolid o Santander para coger un vuelo de Ryanair o de bajo coste para poder ir a Barcelona. Sus precios bajos, así como los horarios creo que son todo un acierto», señalaba García minutos antes de cruzar la puerta de embarque.

De igual forma se manifestaban otros dos empresarios asturianos que, al tiempo, destacaban que el vuelo les había salido, ida y vuelta en el mismo día, a 35 euros por persona. ¡Es fantástico poder viajar a este precio!, exclamaba uno de ellos. Gran parte de los viajeros que habían comprado sus billetes para viajar con Ryanair eran personas jóvenes, muchos de ellos ya habituados a volar con esta compañía y con la experiencia suficiente para saber que tienen que llevar el equipaje de mano y que lo que sube de forma considerable el pasaje con Ryanair es, en ocasiones, la maleta. «A veces, si incluyes una maleta, además de lo que llevas en cabina, dependiendo del peso y el tamaño, resulta más caro que el precio del billete mismo», señalaba ayer David Garrido que, junto con Cristina García, ya había volado con esta compañía desde Santander. Cada uno pagó por su billete a Barcelona 60 euros. «Lo único malo es que no hacen enlaces», añadieron. Daniel y Natalia, dos jóvenes ovetenses estudiantes de Biología que habían sacado billete de ida y vuelta a Madrid, tuvieron que pagar unos 60 euros por llevar una maleta extra.

Los aviones de Ryanair tienen una capacidad de 189 plazas. En el primer vuelo que llegó de Barcelona viajaron 168 personas mientras que de Asturias partieron 182. El siguiente vuelo de la mañana, con destino a Madrid, Ryanair vendió 110 billetes para volar a Asturias y 128 billetes con destino a la capital de España desde el Principado.