Oviedo / Madrid,

José A. ORDÓÑEZ / Agencias

El Ministerio de Fomento tiene previsto recuperar y «dar respuesta» a los sesenta y nueve contratos de obras suspendidos que ha heredado de la anterior Administración socialista, según indicó ayer en el Congreso de los Diputados Mario Garcés Sanagustín, subsecretario del departamento dirigido por Ana Pastor, quien no fue más explícito al respecto. Las actuaciones se corresponden con los recortes en obras públicas aplicados en el verano de 2010, dentro de un conjunto de medidas adoptadas por el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero para tratar de contener el desbocado déficit público. Entre estos proyectos se encuentra la segunda calzada del tramo de Salas a La Espina de la autovía del Suroccidente (A-63), la única obra en marcha en la región que se cayó de la programación del ministro José Blanco en aquel gran «tijeretazo» estival sobre las obras españolas de infraestructuras.

El presupuesto de adjudicación de la segunda calzada del tramo de Salas a La Espina de la A-63 ascendió a 41 millones de euros, aunque, posteriormente, el trayecto recibió un modificado económico a la baja de 2,9 millones. De esa cantidad ya se habían gastado más de 22 millones cuando Blanco anunció la cancelación del contrato. Las obras en la primera calzada siguieron adelante y el trayecto abrió al tráfico el mes pasado. La previsión de Fomento es que los otros dos grandes lotes de esta vía, que son los que van de Doriga a Cornellana y de Cornellana a Salas, estén listos dentro de cuatro años. Cuentan con una partida conjunta de 14 millones de euros en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para este año, lo que supone dos millones de euros más que en las cuentas del ejercicio de 2011.

Los sesenta y nueve contratos de obras suspendidos por el equipo de Blanco suman una inversión de 773 millones de euros y presentan un grado medio de ejecución del 15%.