Oviedo, Eloy MÉNDEZ

El rector de la Universidad de Oviedo, Vicente Gotor, solicitó ayer a la consejera de Educación en funciones, Ana Isabel Álvarez, que el Principado renuncie a la subida de tasas de matriculación propuesta por el Gobierno. La representante del Principado rechazó pronunciarse sobre el asunto, a la espera de que arranque la nueva legislatura, aunque advirtió de que la mayoría de consejeros del resto de autonomías se mostraron partidarios de una revisión al alza de los precios por asignatura para hacer frente a los recortes educativos, durante la última reunión que mantuvieron con el ministro José Ignacio Wert. Además, la institución académica asturiana hizo público ayer el número de plazas por grado para el próximo curso y rechazó establecer un tope para los que se imparten en la Facultad de Economía y Empresa, en contra del criterio de la dirección del centro.

Gotor se reunió con la consejera poco después de que Wert anunciara que el Estado va a establecer un sistema de préstamos a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO) para que las familias con menos recursos puedan hacer frente a la subida de tasas. «Lo que pedimos al Principado es que opte por una congelación de los precios», subrayó el Rector. El Ministerio ha dejado libertad a cada autonomía para que fije unos precios de entre el quince y el veinticinco por ciento del coste total de la formación del alumno. «Actualmente sabemos que ronda el quince por ciento, a la espera de realizar un estudio de contabilidad analítica, y queremos que se mantenga ese porcentaje», dijo Gotor.

Durante su encuentro con la Consejera, también se acordó que la Universidad y el Principado envíen una carta al Gobierno central para que aclare cómo debe aplicarse la nueva carga docente a los profesores, que será mayor para los que realicen menos trabajos de investigación. «Es un tema poco claro en el nuevo decreto», indicó Gotor.

Horas antes, el Rector había presidido el primer Consejo de Gobierno de la Universidad tras las elecciones del pasado 15 de marzo, que rechazó la propuesta del decano de la Facultad de Economía y Empresa, Manuel González, de establecer númerus clausus para evitar una posible masificación de las aulas en el primer curso de algunos de los grados. A cambio, el equipo rectoral se comprometió a que cada grupo cuente con un máximo de ochenta alumnos. «No hemos conseguido convencerles, pero no permitiremos aulas masificadas», indicó tras la reunión. El número de plazas aprobadas para cada titulación es prácticamente el mismo que el año pasado.

La Universidad también aprobó prolongar hasta final de curso el contrato de los profesores asociados vinculados a la institución académica hasta el 4 de mayo, «para no obstaculizar la labor docente en época de exámenes».