Oviedo, P. G.
Un «escándalo político» azotaría el Principado si, siendo presidente regional, Francisco Álvarez-Cascos fuese imputado por el juez del reabierto «caso Gürtel», en el que se investiga una supuesta trama de corrupción vinculada a la financiación del Partido Popular. Al menos, así lo ve el secretario de Organización de la Federación Socialista Asturiana (FSA), Jesús Gutiérrez, que ayer preguntó a Cascos, líder de Foro Asturias, si «está en condiciones» de asegurar que las iniciales P. A.C., -que aparecen en la instrucción del caso como acrónimo de un importante dirigente del PP- «no se corresponden a su nombre». «Los asturianos no merecen correr riesgos de ese nivel», razonó Gutiérrez, ante la posibilidad de que, tras las elecciones del próximo domingo, Cascos pueda continuar como presidente del Principado.
El secretario de Organización de la FSA, que además coordina la campaña electoral del candidato socialista, Javier Fernández, lamentó que Cascos «adultere una y otra vez la realidad, criticando al PP aquí -en Asturias- y en Madrid pactando con él». Álvarez-Cascos «rezuma rencor», aseguró, «y si eso es malo en cualquier persona, es peor en quien dirige los destinos de nuestra comunidad autónoma».
Jesús Gutiérrez -que ayer presentó un cómic sobre el candidato socialista- afirmó que las críticas de Foro Asturias y del PSOE a la campaña del PSOE demuestran «que lo hemos hecho bien», antes de criticar la «debilidad» de Mercedes Fernández y la «hipocresía» del partido de Álvarez-Cascos al «pregonar austeridad» cuando utiliza coches de la marca BMW para su campaña electoral. «Un buen ejemplo de trabajo austero el de Cascos», ironizó.
