Oviedo, A. P

«El proceso electoral de Asturias lo vemos desde la impotencia que nos da la actual normativa que rige las elecciones para los que vivimos en el exterior, algo que sólo podemos calificar como un gran error. La ley Electoral ha establecido requisitos tan complejos que son imposibles de cumplir con los escasos márgenes de tiempo que otorga el proceso electoral. Si no se conociera la historia de esta modificación normativa, podríamos decir que la intención fue casi eliminar nuestra participación». Así se mostraba en su carta, ayer, Manuel Llaneza Jove, residente en Santiago de Chile, quien fue una de las 24 personas que participaron en una encuesta online realizada por LA NUEVA ESPAÑA digital entre los asturianos residentes en el extranjero.

A la pregunta «¿cómo ve desde el país en que vive el desarrollo de las elecciones autonómicas en Asturias?» respondieron asturianos y asturianas residentes en los cinco continentes. Así, de la misma opinión que Manuel Llaneza es Francisco Javier F. López, residente en São Paulo, en Brasil, quien señala que «los emigrantes estamos muy indignados. Cada día hay menos interés en participar en los comicios por las dificultades impuestas por la reforma de la ley Electoral. Los actuales políticos consideran a los ciudadanos que vivimos fuera ciudadanos de segunda». Mayor aún es la queja de Alberto Rodríguez, que vive en Caracas, Venezuela. «¡No nos permiten votar, mandan por correo la solicitud, y en Venezuela el correo es un desastre. ¡Queremos votar, permítanos!», escribe. En la misma línea es la respuesta de Carlos R. González Noval desde Kaiseraugst (en el cantón suizo de Argovia), que ve las elecciones en Asturias «muy negras, sobre todo desde lo difícil que se nos ha puesto poder votar desde el extranjero».

Por su parte, José Luis Díaz Fernández, también residente en el extranjero, ve con buenos ojos la convocatoria de elecciones: «Soy de la opinión que la democracia se corrige con más democracia», señala.