Oviedo, J. A. O.

El Ministerio de Fomento mantiene paralizada su decisión inicial de cambiar los trenes Alvia de Talgo que cubren la ruta entre Asturias y Madrid por otros del fabricante CAF, de menor capacidad y que se adaptan peor a las rampas y curvas de Pajares. Así lo confirman fuentes del sindicato de maquinistas (SEMAF), que aseguran que no hay ninguna previsión de que la sustitución se lleve a efecto, al menos en el corto plazo. «Esta todo parado», señalan sus portavoces.

En la anterior legislatura, con el socialista Teófilo Serrano al frente de Renfe, la operadora ferroviaria anunció su intención de proceder al cambio de los Alvia de Asturias, con el objetivo de reconvertirlos en trenes híbridos, capaces de circular indistintamente por tramos electrificados o dependientes de la tracción diésel, y destinarlos a la línea entre Galicia y la capital de España. El plan fue acogido en el Principado con unánime rechazo político y social, hasta el punto de que la Junta General aprobó una proposición en la que se instaba a Fomento a mantener los trenes de Talgo.

Hace unas semanas, después de que la Comisión de Fomento del Congreso también se pronunciara oficialmente contra el cambio de trenes, fuentes del PP anunciaron el compromiso de la ministra, Ana Pastor, de mantener los Alvia de Asturias. Sin embargo, sólo unos días después el Gobierno, en una contestación al senador forista Isidro Martínez, dejaba en el aire el futuro de los trenes y aseguraba que seguía valorando el cambio.