Oviedo, M. J. IGLESIAS

Técnicos de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León retomarán hoy el dispositivo de búsqueda de un oso pardo, adulto y de buen tamaño, que ayer fue herido por un cazador durante una montería en Vañes, en el municipio de Polentinos, de la montaña de Palencia. Éste es el segundo incidente que se registra en poco tiempo en relación a la población del oso pardo cantábrico. El pasado 26 de agosto un macho joven murió en Porley (Cangas del Narcea) tras quedar atrapado por un lazo colocado por un cazador ilegal. Era la primera muerte de un oso en veinte años, de la que se tuviera noticia en Asturias, a consecuencia del furtivismo.

Los expertos suspendieron ayer por la noche en Palencia la operación de búsqueda con perros, por la falta de visibilidad y tras constatar que el rastro de sangre dejado por el plantígrado era cada vez menor. El objetivo es trasladar al oso a un centro y curarle las posibles heridas.

Según pudo saber LA NUEVA ESPAÑA, el cazador, que participaba en una montería de jabalíes, pertenece a una cuadrilla local. Guillermo Palomero, presidente de la Fundación Oso Pardo, explicó ayer que la entidad se personará como acusación particular para conocer de primera mano las diligencias y contribuir a que se diluciden las responsabilidades. También pidió no «criminalizar» al colectivo de cazadores y señaló que resulta muy fácil confundir un oso con un jabalí. La Fundación ha acuñado incluso el término «jabaloso». Advierte que siempre se debe disparar sobre piezas vistas para evitar errores.

En el dispositivo puesto en marcha participan técnicos de la propia Consejería y de la Fundación Patrimonio Natural, celadores y agentes medioambientales, veterinarios del parque de la naturaleza de Cabárceno y miembros de la patrulla del oso de Asturias. El lugar donde se ha producido el incidente es un sitio boscoso y abrupto, en el parque natural de la montaña Palentina, el corazón de la zona osera de la subpoblación oriental, con un censo aproximado de treinta ejemplares, por lo que se han tomado todas las medidas de precaución para garantizar la seguridad de las personas que participan, así como de las personas que pudieran merodear por la zona. Palomero calificó el suceso de «lamentable».