Oviedo, M. J. IGLESIAS

Los eucaliptos y pinos desplazan al bosque autóctono en Asturias, que desde 2001 ha perdido más de 18.000 hectáreas, superficie equivalente a multiplicar por tres la reserva de Muniellos, en Cangas del Narcea. Lo atestigua IV Inventario Forestal del Ministerio de Agricultura, que también pone de relieve un espectacular incremento de la presencia de eucaliptos hasta alcanzar los niveles que el plan forestal de Asturias prevé para el largo horizonte del año 2053.

El Inventario, que realiza el Ministerio cada 10 años para analizar la evolución de los bosques, asigna a Asturias 453.360 hectáreas arboladas, un uno por ciento más que en 2002, cuando eran 448.360.

Un 46% de la superficie de Asturias está ocupada por árboles, porcentaje que supera la media nacional. Los ecologistas lamentan que el avance se haya realizado a costa de expandir el pino radiata y pinaster, que aumentan un 51,1% y se incrementó de 31.693 hectáreas a 47.908 y los eucaliptos, que hoy son un 15,32% y pasaron de 52.295 hectáreas a 60.311, la cifra que el plan forestal de Asturias estipulada para el 2053.

Las plantaciones regionales se planifican en función del plan, aprobado en 2001, que prevé pasar de 52.838 a 61.838 hectáreas de eucalipto en un plazo de sesenta años, entre 2001 y 2060. En apenas doce años vigente, la presencia del árbol que llegó de las antípodas se ha disparado. En Corvera, Soto del Barco, Avilés, San Tirso de Abres y Carreño los eucaliptales ocupan más del 90% de la superficie forestal y en Muros de Nalón, Castrillón, Gozón, Pravia y otros limítrofes, superan el 80 por ciento. Villaviciosa, con 6.310 hectáreas de eucaliptos, es el concejo que bate el récord y aglutina el diez por ciento de las plantaciones de la región. El plan urbano de Corvera, cuya tramitación está en su fase final, prevé erradicar del concejo todos los eucaliptos. La norma va un paso más allá de las restricciones ya planteadas en Castrillón e Illas, en el marco de sus planes de ordenación del territorio. Los propietarios podrán talarlas y vender la madera, pero después tendrán que hacer un nuevo cultivo de especies autóctonas.

En 2009, la Dirección General de Política Forestal, cuyo titular era Joaquín Arce, por la coalición IU-Los Verdes, aplicó una moratoria. Desde entonces no se autorizó plantar en terrenos no ocupados ya por la especie. Sí en eucaliptales que no precisan de autorización administrativa para su replantación.

El pasado julio, la consejera de Agroganadería, María Jesús Álvarez, anunció una revisión del plan forestal, con especial atención a la asignación de superficies forestales por especies y un nuevo programa dedicado a la biomasa.

Frente a las denuncias de los ecologistas, que piden la adopción de una nueva moratoria, la asociación Asmadera solicitó a la consejera la pasada semana que autorice las solicitudes de plantación de los propietarios privados. Los empresarios alegan que más del 70% de las cortas totales en Asturias corresponden al eucalipto.

José Manuel Lago, de la Coordinadora Ecologista de Asturias, considera que «si ya estamos en las cifras previstas para el 2.053, de continuar a este ritmo de crecimiento en el 2.060 en la costa asturiana no habrá más árbol que el eucalipto», indica. La polémica sobre los eucaliptales se arrastra desde hace décadas. En 1989 el Principado estableció un límite del 4% de la superficie regional para su cultivo. Asturias tiene un millón de hectáreas, por tanto el 4% serían 40.000, superadas con creces.