Volar a Madrid cuesta cinco veces más que a Londres

Nuevo revés para las maltrechas comunicaciones aéreas de la región. Iberia, que opera en solitario la ruta, ha suspendido el primer vuelo de la mañana entre Asturias y Madrid de los lunes y los martes. En principio, la medida se limitará a este mes, ya que la programación que la aerolínea tiene en su página web recupera el servicio para mayo. No obstante, fuentes del sector alertan de que la compañía está haciendo continuas reestructuraciones en su cartelera y no descartan que pueda haber cambios de última hora.

El avión afectado, con salida a las 07.30 horas desde Asturias, es el más utilizado por los empresarios y ejecutivos que se desplazan a la capital. Su suspensión impide llegar a la terminal de Barajas antes de las diez y media de la mañana, ya que ahora el primer servicio de los lunes y de los martes despega del aeródromo de Santiago del Monte a las nueve y cuarto. Aun siendo el más relevante, el de los hombres de negocios no es el único recorte que aplica Iberia este mes en el Principado. La conexión con Madrid se reduce a un único enlace de ida y vuelta los sábados, el día con menos actividad aérea. La previsión es que en mayo vuelvan a operar dos servicios.

Estas decisiones de la aerolínea española de bandera se producen en un momento en el que proliferan las críticas sobre la escasa incidencia en la actividad empresarial de la región de un aeropuerto afectado en los últimos tiempos por importantes recortes y salidas de aerolíneas de referencia. Tras Air France, el último abandono ha sido el de Ryanair, líder mundial del vuelo barato, que ha dejado la conexión con la capital en exclusiva para Iberia. La patronal se queja de que Santiago del Monte tiene pocos destinos, escasas frecuencias y precios elevados, especialmente con Madrid.

Además, desde hace semanas también se han producido abundantes quejas por cancelaciones a última hora y sin motivo aparente. Fuentes consultadas en el sector de las agencias de viajes aseguran que estas anulaciones se achacan a motivos técnicos, pero que, en realidad, se hacen para agrupar viajeros en un servicio y evitar que haya aviones medio vacíos. «Si en uno tienen veinte pasajeros y en el siguiente ochenta, anulan el primero y tratan de reagruparlos a todos en el segundo», subraya un responsable de una agencia asturiana.

Tras el abandono de Ryanair, cuyo precio medio para viajar a Madrid era de 45 euros, Asturias vuelve a tener los billetes más caros del Noroeste para ir a Barajas. Y no sólo eso. Volar a la capital de España desde Santiago del Monte la semana que viene cuesta hasta cinco veces más que hacerlo a Londres y casi el doble que a París. De acuerdo con los precios de ayer por la mañana, el billete más barato a Madrid para el jueves salía por 189 euros, mientras que para el enlace con la capital británica de Easyjet estaba a 35 euros y para el de Vueling a París a 99 euros, por encima de los 109 euros del vuelo a Barcelona de Vueling, la filial de bajo coste de Iberia que opera en solitario la ruta con la terminal catalana de El Prat desde que se produjo la salida de Ryanair de Asturias.

«Iberia tiene una estructura de precios superior, por encima de las firmas de vuelos baratos, y más si no tiene competencia directa», asegura el responsable de una agencia de viajes de la región para explicar que cueste más viajar en avión desde Asturias a Madrid que hacerlo a Barcelona o, incluso, hasta París y Londres.

La conexión con la capital cuenta ahora con entre cinco y seis servicios diarios de Iberia, que tenían una ocupación media de en torno al 65% el pasado septiembre, cuando competía con Ryanair.

La línea de Barcelona consta de dos enlaces de ida y vuelta de Vueling, con una ocupación que ronda el 85%. Aunque los usuarios piden más frecuencias, la programación actual permite realizar un viaje de ida y vuelta en el día desde Asturias a Barcelona, utilizando el primer avión de ida, que sale a las 07.35 horas, para regresar en el que despega en la capital catalana a las 21.30 horas. Sin embargo, en el sentido contrario, de Barcelona a Asturias, el primer vuelo no aterriza en la región hasta las dos y cuarto de la tarde, un horario que no se ajusta para nada a las necesidades de los hombres de negocios. Fuentes empresariales han confirmado a este diario que ya hay proveedores que ponen pegas o se niegan a desplazarse a Asturias por la escasez de sus conexiones aéreas. En el caso de Barcelona, la programación de Vueling les obliga a hacer noche en la región para hacer gestiones por la mañana en el Principado.

Romper un monopolio de Iberia en la ruta con Madrid no resulta sencillo y, para aeropuertos como el de Asturias suele costar dinero a base de subvenciones encubiertas en convenios turísticos. El resto de aerolíneas que han operado está línea la ha abandonado, lo que pone en entredicho su rentabilidad. Air Europa aguantó hasta que se agotó el convenio económico que mantenía con el Gobierno regional y argumentó su decisión en que la conexión le suponía pérdidas millonarias; Ryanair, con una ocupación media de sus aviones de sólo el 57%, se quejó del escaso interés mostrado por el Principado para firmar un acuerdo, y Easyjet, también de vuelos baratos, acabó dejando la ruta pese a que sus aviones iban a más del 80% de su capacidad.

El Ayuntamiento de La Coruña, cuyo aeropuerto también tiene la ruta con Madrid monopolizada por Iberia, ha suscrito un convenio de colaboración turística con Air Europa, valorado en 1,4 millones de euros, por el que la compañía de Juan José Hidalgo se compromete a fletar cuatro enlaces diarios con la capital de España. El Consistorio coruñés, en manos del PP, espera que, con esta competencia, Iberia, como ya hizo en Asturias cuando coincidió con Air Europa, baje los precios de los billetes para viajar a Madrid, que son similares a los de Santiago del Monte y llegan a triplicar los que rigen en los otros dos aeropuertos de la comunidad vecina. En Vigo, la conexión está servida por Iberia Express, que ofrece entre tres y cinco vuelos al día con precios de 130 a 162 euros, mientras que en Santiago de Compostela están Iberia Express, que tiene billetes a 90 euros, y Ryanair, que opera, con una subvención encubierta, un servicio de dos o tres enlaces diarios a 45 euros.

Cantabria también se ha decantado por el convenio con Ryanair para asegurarse una notable oferta de vuelos baratos y una competencia para Iberia en la ruta con Madrid, que está operada por la compañía española a través de la filial Air Nostrum con billetes que oscilan entre los 170 y los 266 euros. El vuelo con el gigante irlandés del «low cost», que este verano ofrece 18 destinos desde Parayas, sale por 45 euros, aunque hay ofertas de 21 euros. Cantabria y Ryanair han suscrito recientemente un acuerdo de promoción de 16 millones de euros y cuatro años de duración.

De esta forma, y con Air Europa en Bilbao, en la franja norte sólo Pamplona y Asturias -además de San Sebastián, con la filial Air Nostrum- quedarán este verano con la exclusiva de Iberia en la conexión con Madrid. No obstante, el aeropuerto navarro tiene un número de viajeros muy limitado. En marzo tuvo 10.717 pasajeros por los más de 98.000 de Santiago del Monte.

La patronal ha emplazado al Principado a buscar alternativas para mejorar la oferta del aeropuerto y adaptarla a las necesidades de las empresas. El Gobierno regional asegura que mantiene contactos con varias aerolíneas, tanto para que amplíen los servicios como para que se implanten en Asturias.

Cangas de Onís es el nombre elegido por Iberia para un avión Airbus A-320 que acaba de ser adquirido por la aerolínea y que será presentado el lunes en el aeropuerto de Asturias. En la terminal de Santiago del Monte se procederá al bautismo de la aeronave con la presencia de directivos de la aerolínea, de responsables municipales de Cangas de Onís y del director de la terminal, Carlos San Martín. En la flota de Iberia ya hay un avión denominado «Concejo de Cabrales». En la imagen superior, el Airbus «Cangas de Onís».