Una vecina de Villaviciosa no pudo pensar las consecuencias que le acarrearían no comunicar su cambio de domicilio. Algunas cartas le siguieron llegando a la dirección de su antigua vivienda y la nueva inquilina, M.B.M.R., en lugar de devolverlas o hacérselas llegar, tuvo peor idea. Se sirvió de esta información para hacerse pasar por ella y estafarla.

La mujer, de 48 años, logró que con los datos de la anterior inquilina sus caprichos le salieran gratis. Ni corta ni perezosa consiguió cargar en la cuenta bancaria de su víctima compras por 4.500 euros. Se trató de joyas, que compró a través de la "teletienda". La presunta ladrona no planificó bien su proceder y al final la Guardia Civil logró pillarla.

La afectada se dio cuenta de que le estaba faltando dinero de su cuenta cuando comprobó en el banco que le habían pasado tres cargos que ella no había autorizado. Eran compras que desconocía. Por lo que el 25 de septiembre decidió denunciar lo ocurrido.

Los agentes investigaron los hechos y dieron con M.B.M.R. para descubrir que ésta se había hecho pasar supuestamente por la víctima para que las compras de alhajas le salieran gratis. El capricho, al final, le ha salido caro.

La presunta ladrona ha sido detenida y ahora tendrá que hacer frente a la imputación de los delitos de estafa, usurpación del estado civil (identidad) y revelación de secretos. Lo que es seguro es que la víctima, a partir de ahora, se cuidará mucho de que cualquier persona con mala fe pueda acceder a su correo. Una circunstancia tan habitual como un cambio de domicilio sin que se comunique la nueva dirección.