El Ministerio de Sanidad, que prepara una normativa para limitar el consumo de alcohol por parte de adolescentes, ha recibido peticiones de partidos e instituciones médicas para que eleve la edad mínima para beber a los 21 años. El portavoz del PP en la comisión mixta Congreso-Senado para el Estudio del Problema de las Drogas, Joaquín Villanova, ha indicado que el límite de 21 años es "una posibilidad". Este debate llega en un momento en que Asturias sigue siendo la única comunidad donde los adolescentes pueden beber a partir de los 16 años, ya que, aunque el Consejo de Gobierno dio luz verde a la nueva ley de Drogas que prohíbe el consumo por debajo de los 18, la nueva legislación continúa aún en periodo de trámite, abierta a enmiendas de los grupos parlamentarios.

Los expertos asturianos consultados consideran positiva la medida de elevar la edad mínima, aunque ven más factible hacer cumplir la ley actual y e impedir que los niños empiecen a beber con apenas trece años, como ahora. El psicólogo Eduardo Carreño, especialista en adicciones, indicó que "todo lo que sea retrasar el inicio del consumo es bueno, porque eso hará más difícil que se causen daños al cerebro y permitirá que éste complete su maduración, que está establecida entre los 21 y los 23 años". El límite actual de 18 años le parece correcto, puesto que es la edad a la que se completa el desarrollo cognitivo y el individuo puede decidir. Para Carreño, por tanto, la clave "no está tanto en cambiar la ley, como en que se cumpla la actual y retrasar lo más posible la edad de inicio en la bebida, que ahora está en 12,7 años".

Por su parte, el psiquiatra Ángel García Prieto indicó que, "retrasando el consumo de alcohol a los 21 años, se consigue completar la maduración del cerebro, y disminuir el deterioro neuronal asociado al consumo de alcohol, que en la forma en que se está haciendo actualmente, en el "botellón", es aún más tóxico y dañino". El psiquiatra añadió que "tener a "dieta" de alcohol a todo el mundo hasta los 21 años quizá será difícil de poner en práctica, pero desde el punto de vista médico es bueno".

Una fuente del PP asturiano quiso dejar claro que las palabras del diputado Joaquín Villanova no significan que haya una propuesta formal en ese sentido, ni siquiera en forma de proyecto. La postura del PP regional continúa siendo que, en Asturias, se eleve la edad permitida de consumo de alcohol a los 18 años, en el mismo sentido que la ley de drogas aprobada por el Consejo de Gobierno.

Consumo responsable

De hecho, la presidenta del PP asturiano y portavoz en la Junta, Mercedes Fernández, mantuvo ayer una reunión con hosteleros en la que no hizo mención alguna a un hipotético retraso de la edad permitida para beber alcohol, según indicó José Luis Álvarez Almeida, presidente de la Asociación de Hostelería de Asturias. Álvarez Almeida no quiso pronunciarse sobre la posibilidad de elevar la edad de consumo, aunque indicó que esa propuesta tiene pinta de ir a desactivarse. Los hosteleros se han mostrado favorables a incrementar la edad mínima de los 16 a los 18 años. "Incluso lo propusimos. Siempre hemos defendido el consumo responsable de alcohol", manifestó Álvarez Almeida.

El Gobierno regional ha dado de paso el proyecto de ley de drogas para que sea debatido en el parlamento regional. Asturias es una anomalía en el conjunto del Estado, puesto que es la única en la que se permite que los menores de edad consuman alcohol a partir de los 16 años. El anterior Gobierno socialista del Principado desoyó las indicaciones del Gobierno central, también socialista, para modificar esa situación, tanto en 2010 como en 2011. El entonces consejero de Salud, Ramón Quirós, sostenía entonces que ampliar la prohibición hasta los 18 no iba a influir en la edad de inicio en el consumo de alcohol, como, según decía, demostraban los datos de las comunidades que habían adoptado esa medida.