Las cifras de la Semana Santa de este año son presumiblemente mejores que las del año pasado, pero en lo que no se acaba de mejorar es en atraer al turismo extranjero, según indican los empresarios del sector. "El turismo extranjero es un fenómeno que quizá se note menos en Asturias", reconoció Daniel García, vicepresidente de la Unión Hotelera. "Es el gran problema que tenemos todavía", afirmó, por su parte, Toño Sánchez.

El empresario se mostró favorable a enfocar la promoción del turismo en la región en ese nicho que debe necesariamente crecer si se quiere convertir esta actividad en una pata fundamental de la economía regional, como en su día indicó el presidente del Principado, Javier Fernández, al marcarse como objetivo que el sector crezca hasta alcanzar el diez por ciento del producto interior asturiano.

"Debemos difundir la región en aquellos países que tienen conexiones aéreas con Asturias, para poder captar un turismo extranjero que echamos bastante de menos", añadió Toño Sánchez. Las quejas por falta de difusión de las excelencias turísticas asturianas parece haber atemperado, tras la crisis vivida el año pasado. "La promoción se está haciendo, no sé si de forma suficientemente fuerte, pero es clave para que nos visiten más", opinó Sánchez.

Productos de la tierra

A falta de sol y de calor, son varias las alternativas de Asturias. Para muestra, el mercado dominical de Cangas de Onís, que ayer estuvo abarrotado de turistas, sobre todo en torno a los puestos de productos agroalimentarios de la tierra como quesos de los Picos de Europa, embutidos y demás viandas.

Una de las que triunfaron fue Pilar Fernández Santoveña, de Vibañu (Llanes), con su puesto de boroñas preñadas y también sin preñar, informa J. M. CARBAJAL. La vendedora se instala el Domingo de Pascua en el mercado y no lo abandona hasta octubre, coincidiendo con el Certamen de la Avellana de Piloña. "Aquí se vende muy bien", explicó la mujer.

Paisaje y actividades

Otro de los atractivos para los turistas son los paisajes asturianos. Los más conocidos, como los lagos de Covadonga; localidades costeras como Llanes, Ribadesella y Tapia, o parques naturales, como Fuentes del Narcea o Muniellos, en el Suroccidente, han estado a rebosar durante este puente festivo. Mercados de artesanía, procesiones y actividades deportivas han sido otros de los alicientes.