Son las doce y media de la mañana; comienza la visita guiada por el Parque de la Prehistoria de Teverga, con parada estrella en el cercado de los bisontes. En ese punto, ante la atenta mirada de curiosos, están echados sobre el verde "Lipión" y "Pipa", la pareja que llegó en marzo al concejo fruto de un plan de conservación de la especie en el que colaboran el propio centro, el Ayuntamiento, el Fondo para la Protección de Animales Salvajes (FAPAS) y el Centro de Conservación del Bisonte Europeo en España. Hasta aquí todo habitual. Pero, si uno abre bien los ojos, se da cuenta de que, entre los arbustos, no hay sólo dos animales, sino tres. Eso sí, un mucho más pequeño y delgado que el resto. Se trata de la primera cría de esta especie que nace en Asturias después de 10.000 años. Todo un acontecimiento si se tiene en cuenta que está aún en peligro de extinción, con tan sólo unos 4.000 ejemplares en todo el mundo.

El pequeño bisonte pesa unos 25 kilos (lo normal para una cría de este animal) y no se separa ni un minuto de su madre "Pipa", a la que el parto le ha vuelto más protectora. No obstante, por ahora se desconoce el sexo del animal, ya que sus responsables todavía no han podido examinarlo. Tampoco tiene nombre. En relación a este último aspecto, Paulina Toporowiz, del Parque de la Prehistoria de Teverga, manifiesta que serán los propios vecinos los que lo bauticen, pudiendo depositar sus propuestas en una urna ubicada en la recepción de las instalaciones.

Lo que sí está claro es que la hembra llegó a la región procedente de Holanda, ya preñada, puesto que el período de gestación de los bisontes es de nueve meses. Según los expertos, las jóvenes ("Pipa" tiene sobre 4 años) suelen tener una cría cada trienio, por lo que dentro de un tiempo la familia de bisontes en Asturias podría crecer. Pero, por ahora, todas las miradas se centran en la cría. Ayer pudieron contemplarla, entre otros turistas, la ovetense Andrea Rubio y el gijonés José Antonio Longo, en compañía de su hijo, de 3 años, José Longo.

"La vemos muy delgada y pequeña en comparación con los padres. Pero es muy guapo", decía la mujer, en su primera visita a los bisontes teverganos. También estaban presentes los leoneses Celestino Balbuena, Rosa María García, Araceli Bermejo y José Luis Fernández tuvieron suerte y pudieron fotografiar al protagonista de la jornada. "Es muy bonito por lo que podemos ver desde aquí. Y, desde luego, esto es un lujo, porque habíamos visto en otros parques algún bisonte. Pero nunca uno así tan pequeñito", dijeron. Ni, por supuesto, tan asturiano.