Arsenio Díaz, el hombre de 89 años que el pasado viernes fue atacado por avispas en la localidad parraguesa de Bodes falleció ayer en el Hospital de Cabueñes, donde había sido ingresado después del suceso. La capilla ardiente ha sido instalada en el Tanatorio del Oriente, en Arriondas.

Los hechos

Díaz salió a pasear junto a su sobrina Sandra Soto y su perra y a escasos metros de su casa el animal revolvió la tierra y se encontró con un avispero. Rápidamente, los insectos la tomaron con los vecinos y el anciano no pudo escapar, recibiendo unas 300 picaduras que le obligaron a ser ingresado en Arriondas y posteriormente trasladado a Cabueñes, donde fue atendido además de los golpes ocasionados por una caída al tratar de escapar. Su mujer, su sobrina y su hijo, José, también fueron ingresados y dados de alta horas después tras ser picados al tratar de rescatar al anciano.