El forista Rafael Felgueroso, concejal de Seguridad Ciudadana de Gijón, incurriría en una incompatibilidad si, de acuerdo con su profesión de abogado penalista, participase en juicios con policías o asumiese casos en los que estén implicadas, de manera directa o indirecta, personas que tengan que ver con el desarrollo de su cargo público en el Ayuntamiento, donde entró en 2011 en de la lista encabezada por la alcaldesa, Carmen Moriyón. Así lo explicó ayer a este periódico Javier Arrién, letrado del Consejo General de la Abogacía y miembro de su comisión deontológica.
La situación del concejal casquista de Seguridad Ciudadana, semiliberado (que recibe un sueldo municipal pero no a jornada completa) al igual que su homólogo de Desarrollo Económico, Fernando Couto, ha despertado las suspicacias de la oposición gijonesa, que asegura que en ningún momento el Pleno discutió ni votó sobre la compatibilidad de ambos cargos con sus actividades profesionales: la de abogado penalista en el caso de Felgueroso y la de empresario en el de Couto.
El caso que más dudas ha generado es el de Felgueroso, que compagina su cargo de edil de Seguridad con el de letrado. El PSOE ya apuntó posibles incompatibilidades en caso de que ejerciese de defensor de un acusado y tuviera como testigos de la acusación a policías locales, subordinados suyos.
Javier Arrién asegura que sería en este caso cuando Felgueroso, ejerciente con el número 1.052 en el registro del Consejo de la Abogacía, incurriría en una situación de incompatibilidad, y remite al artículo número 22 del Estatuto General de la Abogacía, que establece en su punto primero que "el ejercicio de la abogacía es incompatible con cualquier actividad (...) que resulte incompatible con el correcto ejercicio de la abogacía, por suponer un conflicto de interés que impida respetar los principios del correcto ejercicio contenidos en este estatuto". También remite al punto segundo, que, en el apartado C, establece que la práctica de la abogacía es "incompatible con el mantenimiento de vínculos profesionales con cargos o profesionales incompatibles con la abogacía que impidan el correcto ejercicio de la misma". El letrado recuerda, no obstante, que habría que ir "caso por caso" para conocer si hay o no conflicto y que, con "carácter general", la incompatibilidad de su actividad como penalista también puede ser dada por la propia regulación del estatuto del cargo público.
El PSOE gijonés, por su parte, afirmó ayer que "es rotundamente falso que el Pleno haya concedido durante este mandato compatibilidad alguna a algún concejal". Su portavoz, Santiago Martínez Argüelles, instó al gobierno local de Foro a que "lleve el asunto al Pleno si no tienen nada que ocultar". Argüelles aseguró que en la sesión plenaria de septiembre de 2011 Foro incluyó en el orden del día la solicitud de compatibilidad tanto de Felgueroso como de Couto, y convocó para tal efecto escasos días antes del Pleno una Comisión de Hacienda urgente y extraordinaria.
Sin embargo, durante el Pleno la Alcaldesa retiró ambas solicitudes de compatibilidad alegando que "los expedientes estaban incompletos". Nunca más se volvieron a tramitar, recordó ayer Manuel Pecharromán, portavoz municipal del PP. Pecharromán señaló que "nosotros creemos que la ciudad merece que el equipo de gobierno trabaje con toda dedicación, sobre todo teniendo en cuenta que son sólo nueve concejales y eso ha generado carencias". Y se refirió al caso de Rafael Felgueroso. "No es lo más adecuado seguir dedicándose a la actividad de abogado penalista y ser el jefe de la Policía Local. Pero ha sido su decisión personal y la de su partido. Creemos que cuanto más claras queden las diferencias, mejor; con la más absoluta transparencia", razonó.
