La empresa de transporte de pasajeros ALSA ha asegurado este martes que los miembros del comité de empresa de la compañía "se contradicen" al afirmar que el despido de un trabajador --despedido por sustraer gasoil-- no es el motivo de la huelga que CCOO y UGT han convocado para el próximo 12 de enero.

En un comunicado, la compañía ha asegurado que dicho despido es "el único motivo real" esgrimido por los trabajadores durante la reunión que han mantenido esta mañana.

En los momentos previos a la reunión, el comité de empresa ofreció una rueda de prensa en la que negó dicho extremo, asegurando que la convocatoria tiene "ocho puntos", aunque reconocieron que el despido fue "desproporcionado".

Sin embargo, ALSA ha insistido en afirmar que CCOO y la representación de los trabajadores "continuaron defendiendo al trabajador despedido por sustraer gasoil", hecho que "impidió la paralización de la huelga convocada para el 12 de enero".

ATAQUES VANDÁLICOS A LOS AUTOBUSES

Por otro lado, ALSA ha denunciado una serie de "nuevos actos vandálicos" contra ocho autobuses de la compañía, asaltados entre las 7.25 y las 8.15 horas al atravesar Gijón y Oviedo.

Los desperfectos causados han generado una pérdida económica directa de 8.000 euros y se suman a los producidos el día 23 de diciembre contra nueve autobuses de ALSA en Asturias que generaron una pérdida de 19.200 euros.